Al principio pusimos el foco en su forma de tableta, ese concepto híbrido para jugar en casa y fuera. Luego quisimos entenderla indagando en su GPU y su CPU. Y solo de reojo nos hemos fijado en sus mandos, los Joy-Con. Pero la presentación de Nintendo Switch de este 13 de enero y nuestra primera toma de contacto nos han dejado claro que estábamos mirando hacia el lado equivocado. Como habéis podido comprobar ya en nuestras primeras y profundas impresiones, la gran innovación de esta consola es la Vibración HD.
El nombre escogido por Nintendo tiene muy poco tirón, porque suena como a que va a ser más intenso o algo así. Pero no tiene nada que ver, esa alta definición es real, porque cada Joy-Con de Nintendo Switch es capaz de vibrar con una precisión jamás vista en un mando de videoconsola.
El software hace un mapeado extremadamente preciso y punto por punto del mando (o multipunto, al menos hasta 8 al mismo tiempo si nos atenemos al minijuego de las canicas) para hacer vibrar en cada instante solo la parte requerida. Ese comportamiento permite estimular solo la parte de la mano interesada por el desarrollador, creando efectos en el cerebro de engaño como falsos pesos o movimientos internos inexistentes si hay una aplicación que ayude a provocarlo.
Por el momento ese software se llama 1-2 Switch, una recopilación de decenas de minijuegos que van a tratar de emular el fenómeno Wii Sports en la nueva consola. Probamos algunos de ellos que os contaremos en detalle en las impresiones que publicaremos en las próximas horas, pero ya podemos adelantar que el resultado en pruebas como el recuento de canicas en una caja cerrada o la apertura de una caja fuerte al tacto son demostraciones claras de lo que puede significar Vibración HD en el futuro.
Lo interesante será verlo aplicado en juegos más grandes, como parte de una experiencia total que a partir de ahora ya no será solo visual y auditiva, también táctil. A lo que hay que sumar el salto de calidad de los sensores de movimiento de los Joy-Con y del mando Pro respecto a los de Wii U, que hacen que los giros y desplazamientos sean replicados con mucha más precisión y menor tiempo de respuesta. Estamos seguros de que sabremos más en los próximos títulos de Nintendo.