El domingo fue un gran día para Alemania. No solo ganaron el Mundial de fútbol sino que lograron algo más importante (o eso dicen algunos): un jugador alemán consiguió un nuevo récord del mundo en Spelunky.
El experto de Spelunky, que usa el apodo de Pibonacci, consiguió llegar al final del juego en 1:55,353, lo cual, a todas luces, es una locura. Lo consiguió gracias a una combinación del jetpack, de la brújula y del teletransportador.
Huelga decir que grabó su partida, así que si queréis ver un modo de jugar realmente impresionante, id a verla en YouTube. Apenas os robará dos minutos de vuestro tiempo.