Valorar una serie cuya temporada aún no ha finalizado siempre resulta un poco complicado, de ahí nuestra puntuación en el primer volumen (que podéis leer aquí). Pero la espera ha llegado a su fin: el segundo volumen de la cuarta temporada de Stranger Things ya está disponible en Netflix y es tan espectacular como esperábamos. Como decíamos, el primer volumen fue realmente increíble, con un presupuesto digno de un largometraje y un fuerte guiño a los 80. Pero el desenlace de la temporada de más de dos horas solo confirma que la cuarta temporada viene siendo igual de brillante y ambiciosa tras dos largos años.
Ya lo hemos dicho casi todo en el último análisis, pero también podemos decir que con los dos últimos episodios ofrecen una conclusión adecuada y redonda, que la historia es fantástica y los personajes son aún más cautivadores. Además, ahora que ya se ha completado la historia y puedes ver toda la temporada, le hemos cogido cariño a esos pequeños detalles que nos molestaban del primer volumen. Por supuesto, todavía podemos sentir que la parte de la trama en Rusia de Hopper y compañía ha ralentizado una temporada basada en episodios de larga duración. Lo mismo ocurrió con el desvío californiano de Mike, Will, Argyle y Jonathan, que no parece tener mucho efecto en la trama principal. Pero al mismo tiempo, es bastante interesante ver cómo todo se enlaza cuando comienza la batalla final contra Vecna, una batalla mental en diferentes dimensiones inspirada en Stephen King que comienza con Eddie versionando el Master of Puppets de Metallica (momentazo) y acaba con un baño de sangre.
El final de temporada es como ver caer todas las fichas de un dominó, y creemos que el balance entre comedia y horror funciona a la perfección al llegar todo a su punto clave y reunir todas las emociones juveniles. Este último tramo del episodio 8 no es lo único bien montado, sino que además los creadores se las han arreglado para unir los hilos pendientes de las temporadas anteriores para que los espectadores obtengan respuestas de algunos de los grandes misterios de Stranger Things. La temporada 4 ha demostrado ser un crisol en el que los distintos reencuentros entre personajes tendrán consecuencias: sin hacer mucho spoiler, la cuarta temporada no pone el punto final a Stranger Things, aunque quizás gran parte de la misma apuntaba a un gran final aquí para la serie.
Es más, la quinta temporada está en camino, la que los hermanos Duffer creen que será el capítulo final de esta gran serie, lo que sería razón más que suficiente para mantener tu subscripción de Netflix un poco más. La cuestión es cuánto tiempo tendremos que esperar para ver los nuevos episodios. Pero si es, al menos, igual de apasionante, energética y significativa como lo ha sido esta temporada, no nos importa si tarda un poco en coger forma. En su totalidad, la Temporada 4 de Stranger Things es una de las mejores experiencias televisivas de este año.