Español
Gamereactor
avances
SimCity

Sim City - impresión final

Maxis relanza su serie con un juego completamente renovado, pero que se basa en las lecciones aprendidas en el pasado. Sim City es el juego de gestión y simulación más esperado de todo 2013.

Suscríbete a nuestra newsletter

* Campo obligatorio
HQ

Los juegos de hoy día reciben a menudo acusaciones de resultar demasiado imples, en particular de boca de los jugadores que han vivido el período más 'hardcore' del sector, el que va desde la primera mitad de los años 80 hasta la segunda mitad de la década de los 90.

En los últimos días he estado literalmente inmerso en la beta del nuevo Sim City y mi primera reacción -debo admitir- fue la siguiente: "este juego va a cabrear a unos cuantos". Se debió a que, en comparación con Sim City 4, este nuevo Sim City parece infinitamente más fácil.

En efecto, el hecho de haber conseguido un balance muy positivo después de apenas media hora de juego, con 3.000 habitantes contentos y casi sin problemas, me dejó un tanto perplejo. En Sim City 4 tenían constantes líos de tráfico y conseguir un pueblo satisfecho costaba sudor y lágrimas, hasta cuando se trataba de una pequeña aldea de montaña.

SimCity
Publicidad:

Pensándolo bien, este nuevo Sim City es mucho más realista que su predecesor. ¿Cómo se puede generar un atasco de tráfico en un pequeño pueblo de mil habitantes? ¿Para qué sirve una red de transporte público en una ciudad de 2 kilómetros cuadrados? Todo esto era el orden del día en Sim City 4. La primera impresión, por lo tanto, es que Sim City es mucho más fiel a la realidad: la dificultad de la gestión de una ciudad debería ser directamente proporcional a su tamaño. Desde este punto de vista, el reinicio de la serie da en el clavo.

De hecho, en cuanto mi pequeño pueblo se convirtió en ciudad comenzaron los primeros problemas. La escuela no tiene suficientes plazas, hay demasiada basura, la planta de carbón se queda sin combustible, el cuerpo de bomberos es demasiado lento... Todos estos problemas, por suerte, se pueden resolver simplemente haciendo clic en el edificio afectado y añadiendo módulos. Algunos edificios se van ampliando de forma modular: la escuela puede inaugurar una nueva ala para alojar a los nuevos estudiantes, los bomberos pueden abrir una nueva nave, la planta comprar una turbina adicional, etcétera.

SimCity

El presupuesto, a la vez, comienza a estar mucho más apretado y los problemas de gestión se hacen más concretos. Hasta cierto punto, por lo tanto, este Sim City es aún más difícil que el original que Will Wright firmó en 1989. Si alguna vez has probado el clásico, recordarás que la dificultad venía dada por el presupuesto inicial (y los posibles desastres en la zona), más que por el tamaño de la urbe. Una vez captado el mecanismo para construir una ciudad estable, el presupuesto aumentaba de forma dramática. Recuerdo que entonces amasaba fortunas desproporcionadas, de sobra para construir un castillo de hielo en el desierto, si me lo hubiera permitido el juego.

Publicidad:

Aquí, en cambio, la progresión procede de forma inversa respecto a aquel juego del 89 y, obviamente, respecto a Sim City 4. Es decir: la transición de un pequeño pueblo a una ciudad de tamaño medio no requiere un esfuerzo particular. Una vez se alcanza cierto umbral, sin embargo, las cosas se ponen realmente peliagudas.

Por desgracia, la versión beta de Sim City no me permitió transformar mi creación en una nueva Nueva York. EA y Maxis han marcado un límite de tiempo para usar la demo, lo que me impidió alcanzar cierta dimensión. Aun así, tuve la oportunidad de hacerme una idea de las dificultades de la gestión, con habitantes que protestaban a la puerta del ayuntamiento para exigir la solución de problemas a los que mi presupuesto no podía hacer frente a no ser que fuera, ahora sí, con sudor y lágrimas. De repente, Mario Monti me resultó (ligeramente) menos antipático.

Otro aspecto que se ha modificado radicalmente, presumiblemente inspirado en la mecánica del juego para Facebook, Sim City Social, es el de las misiones. Hay algunos asistentes que obligan a completar ciertos objetivos con el fin de liberar trofeos o mejoras para ciertos edificios. Pero no se trata de una mecánica invasiva, pues el jugador puede optar por ignorar las demandas y proceder a su antojo. No obstante, este añadido parece suponer una motivación adicional para todo jugador, una buena señal en un juego que muchos consideran aburrido por la falta de estímulos.

SimCity

Por último, hay que mencionar el gran interrogante que todavía flota sobre el aspecto online/social del juego. El usuario puede interactuar con otros en línea (vía Origin) y comenzar a comerciar con otras ciudades presentes en la misma región. Gracias a la importación y la exportación, de hecho, es posible gestionar con más eficiencia la ciudad, creando un mayor equilibrio. La beta no nos permitió investigar en profundidad algunas de las relaciones con las ciudades vecinas, pero por lo visto estas prácticas tendrán un gran peso en el juego final.

Queda poco más de un mes para probar el Sim City final y confirmar nuestra impresión actual: será el mejor renacimiento para el mejor de su género. El juego presenta un sistema sin duda rejuvenecido, pero al mismo tiempo capaz de satisfacer a los fans de toda la vida.

HQ

Contenido relacionado

0
Sim CityScore

Sim City

ANÁLISIS. Autor: Rasmus Lund-Hansen

Después de una década al margen, Sim City retorna con un proyecto del todo ambicioso. Pero, ¿tiene alguna burbuja?

0
Un mes para construir SimCity en tu Mac

Un mes para construir SimCity en tu Mac

NOTICIA. Autor: Bengt Lemne

EA y el veterano estudio Maxis han confirmado que SimCity, juego de simulación urbana de gran calidad y tortuoso lanzamiento en Windows, se estrenará...



Cargando más contenido