Mientras la franquicia se prepara para su juego más importante hasta la fecha, Game Freak ha querido encarar el nuevo año mirando al pasado y, más concretamente, a Pokémon Espada y Escudo. Las dos entregas que dieron el pistoletazo de salida a la octava generación fueron las primeras completamente nuevas para Nintendo Switch, y se hicieron en tan solo dos años.
El concepto de las entregas de la Generación 8 empezó a dibujarse tras el lanzamiento de Sol y Luna en 3DS, no obstante, la maquinaria no empezó a moverse hasta septiembre de 2017. Ahí, Shigeru Omori, director de las nuevas entregas, nombró a los miembros clave del equipo para empezar a ponerse manos a la obra, en un movimiento que supuso un relevo generacional.
Teniendo muy en cuenta los gráficos del juego, ya que sería una entrega portátil y doméstica, el equipo empezó a estar compuesto por más talento joven al frente de los departamentos clave de desarrollo. Game Freak quiso que especialistas jóvenes en diferentes campos se encargaran de sus respectivas áreas para dar lo mejor de sí, mencionando incluso amantes de las cafeterías para plasmar estos locales en Galar, amantes del deporte para la ropa deportiva de entrenadores, etc.
Cada juego, afirman, se desarrolla de forma completamente diferente al anterior. "Los miembros del equipo intentan no dejarse llevar por la experiencia y disfrutan afrontando cada nuevo desafío que se les plantea", revelan Omori y Kazumasa Iwao (planning director de Espada y Escudo), con 25 años ya a sus espaldas, la presencia de nuevos puestos y oportunidades hace, según recalcan, que "los jóvenes experimenten el fracaso y el éxito y la compañía cambie a generaciones". Pero, sobre todo, consideran que estos movimientos son claves para que Pokémon evolucione.
Sea como fuere, el dato queda ahí, solo dos años de desarrollo, entre septiembre de 2017 y noviembre de 2019, para dar forma a toda una generación y hacer Pokémon Espada y Escudo para Switch. El siguiente paso se lleva a cabo este mismo mes, con Pokémon Leyendas: Arceus.