El precio de venta al público de lanzamiento de Xbox One ha sido uno uno de los principales elementos que han lastrado su rendimiento en los distintos mercados que la han recibido desde el pasado 22 de noviembre de 2013. La máquina se puede adquirir por unos 500 euros, 100 euros más que el otro sistema lanzado en las mismas fechas, y con el dispositivo Kinect v2 incluido de serie en cada caja. Aunque se escuchaban voces de usuarios y críticos que preferían un paquete de Xbox One sin Kinect pero más barato, la postura de Microsoft al respecto parecía firme e inmutable. Hasta ahora.
Hace unos instantes ha quedado confirmado de forma oficial que Microsoft pone a la venta a partir del próximo 9 de junio una edición de su consola Xbox One sin Kinect, a un PVPr de 399 dólares en EEUU que, según confirma la compañía para España, se traduce en la misma cifra en euros. Del comunicado oficial:
"A partir del próximo 9 de junio, en todos los mercados donde se vende Xbox One, ofreceremos Xbox One a partir de $399. Esta es una nueva opción de la consola que no incluye Kinect."
"(...) Par aclararlo, mientras introducimos esta nueva opción, Kinect sigue siendo parte importante de nuestra visión. Muchos de vosotros usáis Kinect para Xbox One todos los días. De hecho, más del 80% de vosotros estáis usando Kinect activamente, con una media de 120 comandos de voz al mes en cada consola".
El dispositivo Kinect es un sensor 3D de imágenes y sonido que se coloca junto al televisor y que no sólo se emplea para juegos de control por movimiento y voz como el reciente Kinect Sports Rivals (uno de sus máximos exponentes hasta la fecha), sino que también forma parte integral de la interfaz de uso general de la consola. De hecho, llegó a ser obligatoria su conexión para que funcionara Xbox One, pero Microsoft decidió finalmente eliminar ese requisito antes del lanzamiento.
En cuanto al respaldo de los estudios desarrolladores de juegos, Xbox One ha recibido ya y va a recibir juegos exclusivos de Kinect como Fantasia: Music Evolved, pero todavía ninguno ha explotado su potencial. Miembros de Rare, naturalmente el estudio máximo valedor de Kinect, contestaba así hace dos meses a Gamereactor:
¿Qué opina Rare de una Xbox One más barata sin Kinect?
Burton: "Creo que la gente que lo pide se va a sorprender con lo que se puede hacer con Kinect, y va a ver que quitarlo y que no esté disponible para todo el mundo limita lo que puedes hacer. Personalmente creo que sería una pena. Entiendo por qué lo dicen".
Robinson: "Yo también creo que sería una pena. Lo tienes ahí, como garantía de que todos los usuarios lo van a tener (...). Entiendo totalmente que la gente la quiera más barata, pero personalmente lo mantendría".
Burton: "Y por otro lado, naturalmente, con el tiempo la tecnología va bajando de precio. No estoy diciendo que vaya a haber una rebaja, pero es lo normal".
Este es el segundo volantazo que Microsoft efectúa en su estrategia para colocar Xbox One en base al 'feedback' de la comunidad, tras el sonado cambio sobre política DRM y conexión permanente online anunciado hace un año. Para los que se interesen en el dispositivo Kinect después de adquirir la nueva edición de la consola, Microsoft pondrá a la venta Kinect por separado en otoño.