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Need for Speed: Hot Pursuit

Análisis de Need for Speed: Hot Pursuit

Criterion, los veteranos en Burnout, se atreven con Need for Speed y queda una asombrosa mezcla entre goma quemada y sirenas lloronas...

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Me encanta. Los neumáticos chillan, las sirenas suenan y los motores rugen. Es espectacular el subidón de adrenalina cuando desciendo una montaña a casi 300 kilómetros por hora, pego un volantazo con mi Lamborghini para esquivar un camión que venía de frente y aprieto el botón del nitro para salir disparado. Es ya un clásico.

Durante sus 16 años de existencia, Need for Speed ha estado por todos sitios. La relación entre arcade y simulación ha sido diferente en cada juego, y si prefieres tu juego de carreras realista desde la posición del piloto, quizás deberías pasar de Hot Pursuit. Porque esto es arcade con mayúsculas, donde ni siquiera puedes cambiar de marcha de forma manual.

Criterion Games se ha encargado del desarrollo, y toda su experiencia con los Burnout se nota. Si te gustaron los Burnout, te sentirás como en casa. Al principio, los coches parecen algo más pesados de lo habitual, algo a lo que te acostumbrarás rápido. Pronto pondrás tu deportivo al límite en las maniobras más salvajes, porque los controles y el giro funcionan perfectamente.

Need for Speed: Hot Pursuit
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Como anuncian tanto la carátula como la pantalla de título del juego, las persecuciones policíacas son parte importante de Hot Pursuit. Por regla general puedes dividir las carreras en circuitos en solitario, duelos entre dos coches y carreras con cuatro o más, todas con variantes con y sin policía. Puedes jugar escapando de la ley o aplicándola con mano dura e ir coleccionando coches y circuitos según puntúas. El modo carrera está construido de forma inteligente, como si en realidad existieran dos campañas. Aún así, no te obligarán a realizar cierto número de carreras callejeras para liberar los eventos de la policía, ni al revés.

Cuando te metes en tu coche de policía debes sacar de la calzada a uno o varios delincuentes. Tendrás algunas ayudas, como una ráfaga EMP, trampas de pinchos, barreras para la carretera o helicópteros. Sientes una extraña satisfacción cuando sacas a un criminal de la carretera, chocas contra los rivales y paras la carrera mucho antes de que lleguen a la meta. Desde el otro lado, los corredores tienen sus propias armas como jammers o impulsos turbo.

El garaje del juego es realmente amplio. Comienzas por la clase roadster, que alcanza un máximo de 250 km/h, pero paso a paso vas avanzando. Al final encontrarás autos increíbles como el Bugatti Vieron o el Koenigsegg y pequeñas pistas de lo que llegará. La mayoría de los coches vienen en modalidad corredor o policía (obviamente se trataría del cuerpo de policía mejor equipado del mundo), por lo que ambos bandos están equilibrados.

Need for Speed: Hot Pursuit
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Escoges las carreras en un mapa, y aunque el mundo está representado como una red de carreteras, las bocacalles y las salidas aparecen bloqueadas durante las carreras para que no te salgas de la ruta. Todas las carreras presentan pequeños caminos alternativos, en ocasiones como atajos, y si juegas como policía están completamente abiertos. Si sólo quieres conducir a través de los 160 kilómetros de calzada disponibles también puedes hacerlo, aunque no puedas ir de misión en misión como ocurría en Burnout Paradise. Todo está restringido al menú, así que el modo titulado Conducción libre sólo está ahí para que disfrutes del paisaje.

Y ese paisaje te dejará boquiabierto. El país ficticio Seacrest tiene de todo, desde montañas nevadas a bosques y desiertos, pasando por preciosas zonas costeras, como un potaje de las mejores vistas de los Estados Unidos. La tasa de refresco es bastante constante y nunca he presenciado un tirón, ni siquiera cuando pasa de todo en pantalla. Además, aunque sea un truco fácil, queda genial cuando las luces rojas y azules iluminan la noche.

La dificultad va aumentando según progresas, pero en una curva bastante suave. Si eres un veterano de Burnout obtendrás medallas de oro al primer intento. Los oponentes no son perfectos, así que es realmente complicado acabar último en algunos circuitos. La excepción son las carreras cronometradas, donde no te permitirán ni un fallo para conseguir el oro. En su versión policíaca son incluso peores, porque te penalizarán si has dañado ese magnífico deportivo que ha pagado el gobierno. Yo casi siempre hacía oro, pero con más de diez horas sigo haciendo plata en las carreras contra el crono.

Need for Speed: Hot Pursuit

Esto nos conduce a uno de los aspectos de Hot Pursuit que más ha mencionado Criterion, el Autolog. La idea es que a nadie le interesa saber si está en la posición 347.000º en los rankings online mundiales. En lugar de eso, el juego lleva un registro de los tiempos del jugador y de sus amigos, y les muestra las carreras que deberían ganar para quedar encima de los demás. También puede presentar eventos basados en las actividades de los amigos, para que puedas vengarte rápidamente si uno de tus conocidos supera el récord que tenías.

Le aporta una nueva dimensión al juego. Si a tus amigos no les gustan los juegos de carreras (o si no tienes amigos), no aporta demasiado, pero como el Autolog está tan integrado en el juego, pronto será tan importante para ti superar a tus amigos como hacerlo con la CPU. Muchas veces he repetido el mismo evento una y otra vez, no por no haber ganado, sino porque no podía soportar estar dos segundos por debajo del siguiente en la lista. Al mismo tiempo, da mucho gusto reventar el tiempo de un colega. Cada vez que lo hagas puedes dejar un mensaje en el muro (que verán tus amigos), con un comentario para fardar un poco más.

Es una idea genial, una forma para jugar contra tus colegas aunque no estén en línea. Este tipo de multijugador online sería una inclusión ideal para muchos juegos de carreras.

Need for Speed: Hot Pursuit

Aunque Need for Speed: Hot Pursuit es un juego increíble, tiene algunos arañazos en su delicada carrocería. La IA es algo tramposa, y aunque lo haga de forma discreta, no es algo que pase desapercibido. Además, según vas avanzando en el juego, las carreras Hot Pursuit (perseguido por los policías) se van convirtiendo más en una supervivencia que en una carrera complicada... quizás se pueda entender como un plus en pos de la variedad. Por último, el lado de la policía no parece tan bien hecho y polifacético como el de las carreras, pero por suerte puedes jugar cada modalidad por separado si no te convence.

Need for Speed: Hot Pursuit es un arcade de carreras apabullante para los adictos a la adrenalina pura. Para los que quieran sentir cómo se te encoge el estómago cuando te cuelas entre el tráfico que viene de frente mientras la policía te pisa los talones. También me ha quedado claro que después de más de diez horas, aún me quedan dos tercios del juego, así que no hay ningún problema con su durabilidad. A lo mejor no gusta a los fans de la simulación, pero para los demás significa una invitación en primera clase para la carrera más emocionante del momento.

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09 Gamereactor España
9 / 10
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Gran sensación con los coches, ritmo acongojante, gráficos geniales, mucho contenido, variedad.
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El Autolog no tiene sentido sin amigos, podrían haber trabajado más la IA y los modos policíacos.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

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