Monkey Island es fruto de una época en la que las reglas para hacer juegos no estaban escritas. Se reunían grupos de creativos con ideas divertidas y de ahí podía salir cualquier cosa. Algunas cosas funcionaron, otras no, pero lo que está claro es que ayudaron a construir el camino que hoy transita la industria.
The Secret of Monkey Island consolidó el género de las aventuras gráficas y lo elevó a género de culto para los jugadores de PC. El motor SCUMMV desarrollado por Lucasarts dio muchas maravillas, tales como Loom, Indiana Jones and The Last Crusade, Indiana Jones Fate of Atlantis, Maniac Mansion y, por supuesto, los dos primeros títulos de la saga de Monkey Island, que ahora nos ocupan.
Esta edición especial actualiza el aspecto visual de los dos juegos, adaptándolos a la era HD. Dejamos los píxeles a un lado y la música de sintetizador para entrar de lleno en las animaciones a mano y las voces dobladas. El trabajo en ambos casos es excelente. Personajes grandes con animaciones divertidas, nuevas ilustraciones para las conversaciones más importantes y escenarios llenos de color y de vida. El apartado sonoro no le anda a la zaga, con una banda sonora remezclada pero conservando los acordes originales y un doblaje (en inglés, eso sí) excepcional.
¿El problema? Pues que desde la perspectiva de alguien que los jugó en su época uno no tiene la sensación de estar ante un producto mimado y artesanal, sino que se trata de un producto más del montón. Es bonito y está bien hecho, pero le falta esa chispa de genialidad y vanguardia que tenían los originales cuando salieron en su tiempo. Tal vez si se hubiera arriesgado un poco más en el apartado visual o si hubieran buscado la espectacularidad en las animaciones (hay ejemplos y muchos como Limbo, Braid o los juegos de Vainillaware) el resultado habría estado más a la altura.
La interfaz también ha sufrido cambios, al dejar de lado las bondades del point & click ratonil. Un botón para moverse y otro para ejecutar la orden más lógica hacia donde el cursor (que moveremos con el stick) apunte. LB par abrir el menú de verbos: coger, tirar, empujar, hablar... y RB para abrir el menú de objetos: grog, dinero, pollo de goma con polea...
Y ya está. Más simple que el funcionamiento de un chupete. La verdadera dificultad de Monkey Island es resolver los disparatados puzles que se nos presentan por el camino e interactuar con los desternillantes personajes de la Isla Mêlée en nuestra odisea para que "Guy.brush" Threepwood se convierta en pirata, consiga el amor de Elaine Marley, la gobernadora de la isla, y derrote al malvado pirata fantasma Le-Chuck. En Le-Chuck's Revenge habrá que conseguir el gran tesoro del Big Whoop, recuperar el amor de Elaine Marley y derrotar al malvado pirata fantasma/zombi Le-Chuck (con el final más controvertido de la historia de la industria).
Como remate final tenemos gran cantidad de extras en forma de bocetos, entrevistas, storyboards y material de producción de los juegos, que harán las delicias de los aficionados más acérrimos.
Esta Monkey Island Edición Especial Colección aúna dos de las mejores aventuras gráficas jamás programadas para PC a las que se les ha hecho un completo lavado de cara. Pierde algo de encanto y, aunque podamos cambiar siempre que queramos al aspecto visual y sonoro antiguo, ¿para eso nos compramos un remake? La dificultad está increíblemente bien ajustada, los diálogos y personajes son espectaculares (los textos de los duelos a espada fueron escritos por el afamado escritor Orson Scott Card) y esto hace que tengamos entre manos dos grandísimos juegos. Sin embargo, se pierde algo de la magia que los hizo grandes y el disco parece más un objeto de coleccionismo y nostalgia que otra cosa.