El pionero diseñador de juegos Shigeru Miyamoto ha reconocido esta semana que también ha caído bajo el hechizo de los pájaros cabreados.
En declaraciones a HookShot, Miyamoto (padre de clásicos como Mario, Donkey Kong o Zelda), aseguró que "no hay muchos juegos que haya jugado recientemente y me hayan convencido de verdad. Pero dicho esto, me lo pasé muy bien con Angry Birds, especialmente con la forma en la que combina elementos de juego tradicionales y nuevos de formas divertidas".
"Angry Birds es una idea muy simple, pero es uno de esos juegos que aprecié inmediatamente en cuanto comencé a jugar por vez primera, antes de desear haber dado con esa idea en primer lugar. Quiero decir, obviamente quiero ser el que dé con las ideas de juego más convincentes y sorprendentes".
Estas declaraciones se salen de la línea habitual de Nintendo respecto a las aplicaciones para móviles y juegos, pero es cierto que se refieren a una combinación que se parece a la que ha utilizado la compañía nipona en multitud de creaciones anteriores. Además, el fenómeno Angry Birds también estará pronto en Nintendo 3DS.
Miyamoto no es, para nada, el primero que reconoce esta idea. Más de 10 millones de jugadores probaron Angry Birds Space en sus tres primeros días en la red. Nuestro análisis reconoce por qué.