La semana pasada tuvo un final bastante complicado para Microsoft, la empresa de software CrowdStrike y todos sus clientes a lo largo y ancho del mundo. La metedura de pata que la mayoría de vosotros sabéis que causó BSOD (pantallazo azul de la muerte) y problemas masivos en todas las infraestructuras, desde bancos a compañías aéreas, es una de las mayores crisis documentadas ocasionadas por la tecnología informática de la historia.
Así que, cuando llega el momento de investigar quién o qué causó el fallo, se señalan con el dedo a diestro y siniestro, y ahora Microsoft opta por culpar de gran parte de los problemas que se produjeron a la UE, que obligó a Microsoft a dar a los desarrolladores de terceros el mismo acceso al núcleo que Windows.
Según The Wall Street Journal, "El fallo de CrowdStrike fue tan devastador porque su software de seguridad, llamado Falcon, se ejecuta en el nivel más central de Windows, el kernel, de modo que cuando una actualización de Falcon hizo que se bloqueara, también se cargó el cerebro del sistema operativo. Fue entonces cuando apareció la pantalla azul de la muerte.
Un portavoz de Microsoft dijo que no puede bloquear legalmente su sistema operativo del mismo modo que Apple debido a un acuerdo al que llegó con la Comisión Europea a raíz de una denuncia. En 2009, Microsoft acordó que daría a los fabricantes de software de seguridad el mismo nivel de acceso a Windows que obtiene Microsoft."
Apple, que anteriormente también ofrecía el mismo acceso al núcleo a los fabricantes de terceros, optó por cortar este acceso hace unos años, precisamente por motivos de seguridad, algo que Microsoft no podía hacer debido al acuerdo con la Unión Europea.
¿Qué opinas de esto? ¿Te afectó de alguna forma la caída de CrowdStrike la semana pasada?