Reseña de Mass Effect: The Board Game - Priority Hagalaz

Soy un gran fan de los dos primeros Mass Effect. Recuerdo estar sentado pegado al televisor viendo a Shepard y sus compañeros subir y bajar en los ascensores más lentos del mundo. Así que me sentí un poco como buscando en el baúl de los recuerdos al volver a ver a Shepard, Wrex, Garrus, Liara y Tali. Pero para ser sincero, y así debe ser en una reseña, me adentré en esta aventura con pocas expectativas.

Mass Effect para mí trata de relaciones, drama, batallas épicas y elecciones con grandes consecuencias. ¿Cómo se traduce eso en un juego de mesa que haga justicia al nombre "Mass Effect"? Modiphius tomó un camino diferente y, en su lugar, ofrece pequeños momentos de ópera espacial en los que la atención se centra más o menos únicamente en la acción. Ciertamente, hay elementos narrativos que aderezan la experiencia: hay todo un librito llamado Narrative Book. No está, ni mucho menos, mal escrito ni es demasiado escueto, pero ni de lejos es suficiente para hacer de Mass Effect: The Board Game - Priority Hagalaz una epopeya a lo Gloomhaven que os mantenga ocupados a ti y a tus colegas durante un año. No, aquí se trata de bang, boom, acción rápida y muy entretenida, que realmente se siente y respira Mass Effect y recibe ese pequeño condimento extra a través de la tradición y las historias.

Las expectativas no pueden ser tan altas como para pensar que va a contener toda el alma de Mass Effect, cuando es un juego relativamente barato. Es lo que es, y si te va eso, encontrarás un juego realmente agradable. Al igual que Gloomhaven: Jaws of the Lion y Sleeping Gods, no encontrarás un tablero de juego propiamente dicho en la caja. El tablero es un libro del que pasas las páginas cuando has avanzado en la campaña. Es extremadamente flexible y requiere un espacio mínimo, además de agilizar el inicio real de la partida. Seis miniaturas con los personajes mencionados, dos de los cuales son Commander Shepard, tanto en su versión masculina como femenina. Los enemigos vienen en forma de pequeñas fichas de cartón y hay un montón. El empaquetado y la organización tampoco es algo que destacaría como un punto a favor, porque hay demasiadas bolsitas con cremallera y es difícil controlar el contenido. Pero funciona, no es un desastre y no me impide divertirme.

La campaña funciona ofreciéndote una historia en la que, yendo por el buen camino o por el malo, acabarás en distintos lugares y tendrás distintas condiciones en el siguiente mapa. No hay más de cuatro o cinco misiones antes de que hayas completado la aventura, pero como en realidad puedes tomar distintos caminos (paragón o renegado, como en el videojuego), una repetición puede ofrecer una experiencia completamente distinta. Los personajes también son claramente nicho, con Wrex queriendo entrar a puñetazos y cuerpo a cuerpo, Garrus queriendo disparar a distancia, y Tali hackeando puertas y robots. Dicho esto, Modiphius ha encontrado la esencia de la parte de acción del original y la ha traducido en un viaje muy accesible y agradable.

¿Es accesible? Sí, no se trata de una historia avanzada y no tiene por qué serlo para que sea un buen juego de mesa con relativa profundidad. El juego se desarrolla exactamente de la misma manera tanto si juegas solo como con cuatro jugadores. Siempre tienes cuatro de los personajes sobre la mesa y el primer jugador tira doce dados, elige tres y hace diferentes elecciones con ellos, y luego los dados restantes pasan al siguiente jugador y luego al siguiente hasta que terminan y todos han jugado su ronda. Durante cada ronda, robas una carta enemiga que indica lo que está haciendo el enemigo y, temáticamente, puede resultar un poco extraño cuando un enemigo aparece de repente a tus espaldas. Pero si matas a un enemigo, obtienes XP y puedes marcar una pequeña casilla en la tarjeta de personaje y, con el tiempo, subir de nivel y desbloquear nuevas habilidades. Saquea, corre, dispara, haz algo que requiera la misión y luego vuelve a hacer lo mismo (más o menos) en el siguiente mapa. Sí, es un poco repetitivo, pero como he mencionado antes, la parte narrativa funciona muy bien y la mecánica encaja muy bien en un juego de Mass Effect, y en general, no me importaría repetirlo.

Dicho esto, el reglamento es un poco confuso al principio. No parece estar organizado de forma lógica y podría mejorarse. Esperemos que Modiphius pueda trabajar en ello para la próxima edición. Pero una vez que lo entiendes todo, no es nada complicado, sin embargo, con un buen libro de reglas, puedes evitarlo y dejar que los jugadores empiecen más rápido y sin problemas.

Una vez que hayas terminado la guerra y completado la última misión, puedes volver a empezar. Brillantemente, todo lo que tienes que hacer es borrar algunos puntos y líneas que hayas hecho con el elegante rotulador de pizarra blanca. Si algo es Mass Effect: The Board Game - Priority Hagalaz, es suave y fácil de coger. Con un nombre así, puede resultar difícil de creer, pero es un hecho. Si entras en este juego con las expectativas adecuadas o, al menos, dispuesto a experimentar algo que no sea la totalidad de Mass Effect en una pequeña caja, sin duda te divertirás con él. No es perfecto ni mucho menos, pero sin duda merece la pena gastarse una cantidad relativamente pequeña de dinero en él.