El presidente de la CONMEBOL, Alejandro Domínguez, propuso un Mundial de fútbol de 64 equipos (el doble de lo habitual), pero no está consiguiendo demasiados apoyos, al menos entre sus vecinos al norte. Victor Montagliani, presidente de la CONCACAF, declaró a ESPN que no cree que sea lo correcto, no sólo para el torneo, "sino para el ecosistema futbolístico en general, desde las selecciones nacionales hasta las competiciones de clubes, las ligas y los jugadores".
"Aún no hemos puesto en marcha el nuevo Mundial de 48 equipos, así que, personalmente, no creo que la ampliación a 64 equipos deba siquiera estar sobre la mesa", dijo, refiriéndose al Mundial 2026, que se celebrará en Estados Unidos, Canadá y México, y que ya tendrá un formato ampliado, que ya está ayudando a clasificarse a países poco habituales como Nueva Zelanda.
El presidente de la CONCACAF se hace eco del presidente de la UEFA, Aleksander Čeferin, que afirmó que era una mala idea, y dijo estar extrañado de que la idea se esté extendiendo sin haberla oído proponer formalmente en el Consejo de la FIFA. Un Mundial de 64 equipos supondría también el doble de partidos, 128 en lugar de los 64 habituales.
Al parecer, la idea fue lanzada por el presidente del fútbol uruguayo, cuyo país será coanfitrión del Mundial 2030, que se celebrará en España, Portugal y Marruecos, y con un número limitado de partidos en Uruguay, Argentina y Paraguay, para celebrar el centenario del primer Mundial celebrado en Uruguay.
El jeque Salman bin Ibrahim Al Khalifa, presidente de la AFC, va aún más lejos, pues considera que sería un "caos total". "Podría venir alguien y exigir que se aumentara el número a 132 equipos. ¿Dónde acabaríamos entonces?".