Ken Levine acota su próximo juego: "mundo abierto y pequeño"

El creador de Bioshock y maestro de la narrativa en videojuegos Kevin Levine ha soltado un poco de cuerda sobre su próximo título, aunque elementos clave como el nombre y las mecánicas sigan siendo un misterio. Hasta la fecha sabíamos que iba a ser un juego en primera persona ambientado en un mundo de ciencia ficción y pensando para jugarse una y otra vez.

Ahora, en un evento solidario llamado Take This, ha compartido un par de nociones más. Por ejemplo, como pista ha mencionado que se está inspirando en un títulos tan diversos como Dark Souls, System Shock, La Tierra Media: Sombras de Mordor, Civilization o Dying Light.

"Estamos trabajando en una especie de juego de mundo abierto a pequeña escala", dijo durante el programa. Esa decisión radica en que "si quieres ofrecer al jugador la libertad para guiar la experiencia, eso es lo opuesto a la naturaleza de los juegos lineales que hemos hecho antes como Bioshock o Bioshock Infinite".

Su dilema es cómo lograr ofrecer algo rejugable y capaz de reaccionar a las decisiones de los jugadores y que además tenga al menos la calidad del contenido de sus proyectos previos. Una de las respuestas conduce a la estructura de su nuevo juego, que mantiene una narrativa semejante pero con más capas.

"Hacerlo rejugable ofreciendo a los jugadores varias formas distintas de afrontar los problemas y dejando que sean ellos de verdad quienes dicten la experiencia", es la respuesta conceptual según Levine, pero "no es un problema sencillo". Lo que su estudio está tratando de construir es un "LEGO narrativo", es decir, que en lugar de un hilo argumental hay varias piezas que se pueden unir de una forma u otra para cambiar el resultado.

Poco más se sabe de este juego, que el de 2K Games ha vuelto a definir como algo alejado a un AAA. Lleva en desarrollo desde mediados de 2013 y todavía le queda.