Juegos del Año 2022: El juego decepción

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10. Mario Strikers: Battle League Football

Fútbol, Mario y año de Mundial. Y un retorno muy esperado diecisiete años después. Ah, y el estudio ahora de su propiedad. Nintendo y Next Level Games lo tenían todo de cara para triunfar con Mario Strikers: Battle League Football, pero al final no han conseguido que su juego subiera a la primera división de éxitos de Switch.

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Rácano en contenido (las actualizaciones solo han sido nuevos personajes), pero sobre todo desequilibrado, fallón e incómodo online a la larga, sus responsables no han sabido tratarlo como un juego más continuo y dedicado a la comunidad, y en su lugar lo han desarrollado a la antigua, de forma hermética y anticuada. Y eso que sus novedades en el sistema de juego lo hacían más técnico y profundo.

9. Babylon's Fall

Podríamos haber perdonado la caída de Babylon's Fall si hubiese ocurrido después de haber tenido muchos años de gloria, al igual que el antiguo imperio al que debe su nombre. Por desgracia, ese no ha sido el caso del primer título con live service de PlatinumGames, ya que en realidad el juego nunca llegó a despegar. Ya dieron una mala impresión su genérico diseño de fantasía oscura y sus gráficos confusos, y conforme más avanzábamos por los pasillos lineales, peor se ponía la cosa. Lo único que estuvo a la altura de los estándares habituales del estudio fue el combate, pero ni siquiera ese fue lo suficientemente bueno para salvar el juego.

Cuando Square Enix (su editora) vio que Babylon's Fall no podía reunir a más de 1.200 jugadores a la vez en torno al lanzamiento (cifra que se redujo rápidamente a dos dígitos), decidió cortar por lo sano para no tener más pérdidas y anunció que los servidores del juego se cerrarían en febrero del año que viene. Esto quiere decir que Babylon's Fall, que se vendió a un precio de venta al público completo y está repleto de microtransacciones, no llegará siquiera a celebrar su primer aniversario. Un auténtico bochorno.

8. High on Life

A ver, no es que esperáramos mucho de un juego como High on Life, donde la premisa es que vas haciendo el ganso con una pistola parlante con un universo lleno de alienígenas que parecen sacados de las series de animación para adultos. O quizá de hecho sí esperábamos que el tándem de shooter y coñas ácidas funcionara bien, pero se quedó corto.

High on Life borda la ambientación y el humor, pero estrella estrepitosamente su sistema de juego con el peor control que hemos visto en siglos, y teniendo en cuenta que es un juego de disparos en primera persona, la decepción en nuestor análisis lo dejó bien patente. Sí, el juego ha vendido de lo lindo y en Xbox están la mar de contentos con él, pero eso solo nos deja patente que podría haber sido mucho, mucho más si hubiera hecho el "juego" de High on Life atractivo. Decepcionados.

7. Kingdom Hearts: Integrum Masterpiece

La serie de Kingdom Hearts ha conquistado un montón de corazones con su ingeniosa combinación de personajes de Disney y de Final Fantasy y una trama sorprendentemente profunda. Así que, al menos en apariencia, parecía que iba a ser todo un regalo que se lanzara la serie completa a principio de este año para la consola para toda la familia, Nintendo Switch.

Sin embargo, Kingdom Hearts se lanzó para la Nintendo Switch como una versión en la nube, lo que significa que los jugadores tenían que pelear a través de juegos para PS2 y PSP de hace 15 o 20 años con una conexión inestable a un servidor remoto.

Podemos soportar de mala gana el lag y una frecuencia de imagen inestable hasta cierto punto con la Cloud Version de juegos AAA como A Plague Tale: Requiem, que de otra forma no estarían disponibles para Nintendo Switch, sin embargo, en el momento que la consola puede ejecutar el juego de manera nativa y sin problema alguno, este Kingdom Hearts debería cumplir. Sencillamente, no hay excusa para hacer que el juego esté solamente disponible vía streaming. Esta serie tan querida se merecía algo mejor.

6. CrossfireX

Parecía una buena idea que Smilegate contratase a Remedy con el objetivo de crear una campaña para un jugador para el lanzamiento de su shooter en primera persona, CrossfireX, título muy popular en China y en su país de origen, Corea del Sur. Teniendo juegos como Max Payne y Control a sus espaldas, Remedy es uno de los mejores a la hora de crear experiencias para un jugador intensas y reñidas, y nunca han creado un mal juego. Hasta ahora, claro.

Finish, el estudio, decidió dejar que su equipo de suplentes desarrollara CrossfireX, y eso se notó desde el principio de esta campaña sin alma inspirada en Call of Duty. La campaña era un completo desastre a nivel de historia y aunque el entorno post-soviético ofrecía un campo de batalla que era oportunamente sombrío, nunca se utilizaba como adecuadamente. Al no contar ni con partes del entorno destructivas ni con ningunas dimensiones tácticas, CrossfireX se sentía como un decrépito campo de tiro ubicado en un parque de atracciones abandonado en Bulgaria.

5. Lego Brawls

Cuando en 2019 se lanzó Lego Brawls para teléfonos, este tuvo una buena acogida. Aquí se trataba de un sencillo y encantador juego inspirado en el Smash Bros. de Nintendo con controles sensibles al tacto, e incluso se podía jugar "gratis" si estabas suscrito a Apple Arcade. Tres años más tarde, tanto jugadores como la crítica están poniendo verde el mismo título.

Puede que esto pueda parecer sorprendente, pero la razón detrás de esto es bien sencilla: el estudio, Red Games Co. tomó la decisión de lanzar al ring a un campeón de peso mosca contra verdaderos pesos pesados (como Super Smash Bros. Ultimate), y al no contar ni con nuevos modos de juego ni con gráficos añadidos, quedó K.O. tras un breve primer asalto. Fue un lanzamiento lamentable con un precio de 39,99 euros.

4. New Tales from the Borderlands

La obra original, Tales from the Borderlands, que se estrenó de forma episódica durante 2014 y 2015, fue fruto del apogeo de Telltale Games. La emocionante aventura de Rhys y Fiona en el violento planeta de Pandora era como una subir a una montaña rusa durante diez horas, para la que ni siquiera te hacía falta una bolsa para vomitar, ya que el juego no contaba con la cursilería exagerada de las últimas temporadas de The Walking Dead: The Game. En comparación con eso, New Tales from the Borderlands es como estar diez horas encerrado en un ascensor. Gearbox, que ha gestionado él mismo el spin-off de su conocido "looter-shooter", ha llenado el proyecto de una cantidad enorme de humor forzado y sobrecargado, lo que hace que el juego rara vez, o nunca, tenga la más mínima gracia.

Probablemente, podríamos haber tolerado esto si la trama o los personajes fuesen medianamente decentes, pero en el momento que la obra comete el pecado de dejar que lo excéntrico sustituya a la personalidad genuina, nos queda una historia aburrida y sin alma que seguramente decepcionará tanto a los fans de Borderlands como a los fans de las aventuras basadas en la historia.

3. Somerville

Limbo e Inside son dos nombres que representan tanto el boom de los juegos indie en las últimas dos décadas como la nueva edad dorada de los plataformas cinematográficos. El primer error de Somerville fue presentarse como lo nuevo de parte de los creadores de aquellos, cuando se parece bien poco en las mecánicas de juego para avanzar en su mundo de ciencia ficción, eso sí, fascinante.

Si sumamos que salió bastante roto y que no supo expresarse en los momentos clave de la trama, Somerville queda como una preciosa decepción de 2022. Al menos puede pulir sus problemas técnicos en estos meses, pero seguirá dejando perdidos a muchos con sus puzles obtusos. En todo caso, sirve de promesa de lo que puede hacer Jumpship en el futuro y deja algunos planos memorables.

2. FIFA 23

Lo mismo que decíamos de Strikers, pero ahora con el juego más vendido de la historia de forma anual y, para más inri, con la morbosa despedida de EA de la licencia de la Federación. Habrá quien disfrute de FIFA 23 más que de FIFA 22, sobre todo en la nueva generación, sí, pero el juego de juegos de fútbol sigue desatendiendo lo que más importa: la dinámica de partido. Haciendo caso omiso de las críticas de los jugadores de todos los niveles año tras año, el gameplay de FIFA 23 volvió a salir muy roto, con movimientos extraños y nada creíbles, con fallos y atascos y con, una vez más, una guionización excesiva que dejaba más ilusión que agencia al jugador.

Precioso y espectacular en algunos momentos pero corto en modos como el Carrera y volcado con FUT, no basta con adivinar el ganador del Mundial por cuarta vez consecutiva, y esperamos que EA Sports FC haga borrón y cuenta nueva para no embarullar más un sistema harto de sí mismo que no admite más parches y retoques encima de todo lo demás.

1. Saints Row

Y si algo nos ha dejado el corazón roto y el cabreo en el cuerpo este 2022, ha sido el reboot de la serie Saints Row. Este reinicio tuvo una impresionante campaña de márketing previa al lanzamiento y Embracer esperaba despegar por todo lo alto sus beneficios en la segunda mitad de año, pero su mundo vacío, sus bugs y su propuesta manida de "quiero ser GTA V, pero no puedo" dejó mal sabor de boca a todo el mundo y el lanzamiento fue el fracaso más sonado de todo el año.

Falta de variedad en los NPC, poca variedad en las tremendamente aburridas misiones secundarias y un sistema cooperativo que no aportaba nada al juego solo engordaron la lista de problemas a los que se enfrentó el juego, y que pese a las actualizaciones que Volition ha ido añadiendo el público ya no ha tenido fuerzas para volver. La esencia de Saints Row está aquí, cierto, pero el tono más serio y su tono repetitivo no ayudaron a que el juego despegase, y pronto pasó a la lista de "juegos de ocasión en las tiendas". Una saga que volverá a la nevera durante unos cuantos años, si no para siempre.