It Takes Two se queda huérfana por culpa de Take-Two

Con Take-Two Interactive no se juega. La editora madre de Rockstar Games y 2K Games, entre otras compañías, ha reclamado la marca It Takes Two a Hazelight. El estudio de EA ha tenido que renunciar a la propiedad del nombre mediante una carta de abandono de marca presentada a la oficina de patentes de Estados Unidos.

La misma compañía ya siguió un movimiento similar contra el juego en territorio europeo, acogiéndose al "riesgo de confusión y desventaja leal/perjuicio al carácter distintivo o al renombre". En territorio norteamericano, en cambio, el proceso ha avanzado hasta el punto de que Hazelight ya no es propietaria de la marca que da nombre a su nominado al GOTY 2021.

Se desconoce si ambas partes han llegado a algún tipo de acuerdo tras esto. Como recogen en Eurogamer, Hazelight no ha podido pronunciarse al respecto, ya que "no podemos emitir declaraciones de disputas en proceso", lo que denota que se estaría buscando algún tipo de negociación para recuperar la propiedad o para evitar que el caso escale por alguna posible infracción de copyright.

El mismo medio recoge otros casos similares con Take-Two como protagonista. En el podcast Virtual Legality recogen un total de 25 disputas solicitadas por la editora, cuando "la mayoría de otras compañías de videojuegos necesitan entre 6 y 7 años para llegar a esa cifra". No quieren tomar prisioneros, enfrentándose a marcas como la asiática Starrocks, Max Fayne, Think Like a Rockstar o Rockstar Axe Throwing.

¿Cómo afectará el caso It Takes Two a Hazelight? Por el momento, el juego sigue disponible para su compra en las tiendas habituales.