Cuando arranqué por primera vez la versión preliminar de Mandragora, lo primero que se me vino a la cabeza fue Trine. La perspectiva en 2.5D y los vibrantes colores y escenarios me hicieron pensar que este RPG de acción ladraba más de lo que podía morder. Tardé menos de 20 minutos en darme cuenta de lo equivocado que estaba.
Mandragora es un RPG de acción con elementos de Metroidvania. Esto significa que, aunque se parezca a Trine por su estilo artístico y su ambientación fantástica, su jugabilidad es más propia de Blasphemous que de Dark Souls. Es desafiante y puede ser un poco frustrante, pero lo más importante es que requiere una gran cantidad de paciencia y habilidades de resolución de problemas para poder tener éxito.
Aunque no voy a insistir demasiado ahora en la narrativa y la historia, ya que la versión preliminar no ayudaba mucho a verla con buenos ojos (las escenas de prueba pueden dejar esta impresión, pero teniendo en cuenta que se trata de un prelanzamiento sin fecha de lanzamiento o venta a la vista, se puede perdonar), la jugabilidad se ha diseñado de tal forma que requiere un poco de ingenio por parte del jugador. En este juego no te llevan de la mano, tienes que averiguar adónde ir, cómo abordar los objetivos de las misiones, cuál es la mejor forma de enfrentarte a los nuevos tipos de enemigos, todo ello evitando los peligros del entorno y sin perder la vida y tener que reaparecer en el último punto de control. Si mueres, tendrás que volver al lugar de tu muerte para recoger la esencia perdida sin morir en el proceso, de lo contrario se perderá para siempre, es decir, igual que en Dark Souls.
La principal diferencia entre Mandragora y otros Metroidvania es que se trata de un juego de desplazamiento lateral. Esencialmente, aunque el mundo está construido de tal forma que no puedes llegar a multitud de zonas hasta que no hayas desbloqueado objetos y habilidades específicas más adelante en la historia, te desplazas por el mundo simplemente moviéndote a izquierda y derecha. También hay un cierto grado de verticalidad, pero no de la misma forma que en otros Metroidvanias como Metroid Dread, Disney Illusion Island, Dead Cells, Hollow Knight, etc. Este estilo de juego más horizontal hace que el mundo sea más fácil de recorrer, aunque le quite un poco de emoción al combate.
En cuanto al combate, se basa menos en la habilidad y más en la sincronización. Lo que quiero decir con esto es que tendrás que superar a los enemigos esquivando con éxito sus ataques y luego golpeando en las breves ventanas en las que son vulnerables. No hay una mecánica de parada crucial, así que no puedes limitarte a bloquear, parar, atacar y repetir. No, se trata de esquivar y rodar para evitar proyectiles y golpes enemigos y contraatacar cuando llegue el momento. Aunque este estilo de combate destaca por su desafío, empieza a resultar un poco rancio y repetitivo, pero afortunadamente las armas y objetos singulares y las diferentes clases pretenden rectificarlo.
Vale la pena decir que, en esta versión preliminar, solo he podido probar la clase Vanguard, similar a la de los caballeros, que gira en torno a la acción cuerpo a cuerpo. Pero también habrá opciones para jugar como usuarios de magia a distancia y más, para agitar mejor el combate y la acción. También están las diferentes armas, objetos y habilidades que puedes encontrar a lo largo de la historia y que te abrirán el camino a ataques más contundentes, mejor equipo defensivo e incluso tipos de ataque únicos, pero, de nuevo, como esta versión preliminar era relativamente corta, no he podido hacerme una idea de cómo se integrará todo esto en la experiencia completa de Mandragora.
Lo que sí puedo decir, por lo que he podido probar, es que el mundo parece un lugar muy atractivo para explorar. Hay una colección de entornos únicos por los que viajar y una gran variedad de tipos de enemigos a los que vencer (o, más bien, de los que recibir una paliza). Del mismo modo, los fragmentos de la historia que conseguí descifrar me ofrecieron una imagen bastante interesante, que sin duda aportará mucho a la experiencia de Mandragora cuando se estrene en su totalidad.
No voy a deciros que la versión preliminar de Mandragora me ha dejado tan impresionado que ya estoy deseando echarle un vistazo al juego final, pero al mismo tiempo, estoy deseando ver cómo Primal Game Studio mejora e itera sobre lo que tienen a tiempo para el lanzamiento, sea cuando sea.