Análisis de Hell Let Loose

Los shooters multijugador ambientados en la II Guerra Mundial son difícilmente novedosos hoy en día. Ya sea Call of Duty, Battlefield o incluso Enlisted, hay mucho contenido para satisfacer tus caprichos si te gusta la temática. El estudio independiente Black Matter lo sabe, y ha echado un vistazo al género para crear un título que se enorgullece de su realismo y que no está diseñado para la mayoría, sino para los fans del género que busquen una experiencia que se base en la estrategia y el juicio tanto, si no más, como en las mecánicas. Hell Let Loose ha superado ya su fase de acceso anticipado y está disponible para todo el público, así que me he alistado en los campos de batalla para descubrir qué plantea.

Hell Let Loose es un FPS multijugador de los pies a la cabeza. No hay historia ni argumento, de hecho ni siquiera hay tutorial. Iniciar el título te lleva al menú principal, donde debes unirte a un servidor, la mayoría son administrados por miembros de la comunidad, para entrar directamente a la acción. Con cierto conocimiento previo del género, no hay mucho que aprender en cuanto a mecánicas más allá de las bases del movimiento y el uso de armas de fuego, por lo que no es un verdadero problema que no haya tutorial. Sin embargo, considerando la forma en la que se juega a Hell Let Loose, un poco de entrenamiento y consejos serían útiles.

Verás, a diferencia de Battlefield V o Call of Duty: WWII, que son shooters arcade de ritmo acelerado en primera persona, Hell Let Loose es una de las representaciones más auténticas del género. El valor del tiempo para matar es muy bajo, lo que significa que morirás en un instante, los mapas son enormes, los jugadores rivales se esconderán en cada rincón y grieta para acumular bajas y los modos de juego requieren mucha comunicación en el equipo para tener éxito. Es el tipo de diseño que no duraría ni diez minutos en las franquicias de EA o Activision, pero para Hell Let Loose es su mayor baluarte.

Este título contiene una serie de modos de juego inspirados en el género de estrategia en tiempo real, donde los jugadores tienen que trabajar juntos y comunicarse de manera efectiva para lograr la victoria. Lo que Hell Let Loose pide es que los usuarios se coordinen para capturar varias ubicaciones y recursos para cambiar las tornas de la batalla a su favor y, debido a que la mayoría de las salas de espera son de 100 contra 100, se necesita un nivel de comunicación sin precedentes para alcanzar la victoria. No hace falta decir que es ambicioso y básicamente requiere una comunidad activa y comprometida para alcanzar el éxito, pero lo ha conseguido y, a cambio, tenemos un juego de tiros ambientado en la II Guerra Mundial que es único y diferente al resto.

Siendo Hell Let Loose un shooter, te reconfortará saber que las mecánicas del juego están verdaderamente medidas y se notan receptivas y fluidas. No puedes jugar como lo harías en Battlefield o Call of Duty, pero está diseñado con una calidad suficientemente alta como para que nunca te sientas obstaculizado por el sistema. Lo mismo se aplica al movimiento en mayor medida. En realidad, es bastante arcade por naturaleza y sufre los mismos problemas que muchos FPS, en el sentido de que tu personaje parece tener una resistencia ilimitada, sin embargo, a veces te encuentras con dificultades para saltar simples vallas.

Como se trata de un título ambientado en la II Guerra Mundial, ser un soldado de infantería es solo una parte de lo que ofrece. Hell Let Loose presenta un combate con vehículos que te pone al volante, o mejor dicho, al blindaje, de una gran variedad de maquinaria de guerra. Como los mapas son enormes y hay muchos lugares para esconderse, los tanques y otros vehículos nunca llegan a ser excesivamente opresivos para la infantería, como es el caso de Battlefield, lo que hace que la experiencia sea mucho más equilibrada en ese sentido.

Aparte de la cooperación en equipo y los modos de juego inspirados en el género RTS, una de las áreas donde Hell Let Loose también se distingue de sus competidores es en su autenticidad en el campo de batalla. Nos encontramos ante un título en el que estar bajo fuego enemigo es especialmente opresivo, los sonidos de las explosiones son aterradores y los vehículos que salpican el paisaje se convierten en monstruos terroríficos más allá de lo imaginable. Y luego está el diseño del mapa, que te hace no querer salir de las trincheras por temor a que otro jugador que se esconda en la espesura te mate rifle en mano. Es una versión del género FPS que reemplaza las dosis rápidas de dopamina y su naturaleza acelerada por estrategia y miedo, y funciona francamente bien.

Aun así, como ya he mencionado, no es un juego para la mayoría del público. Hell Let Loose es tanto un título difícil por la forma en que se juega, como por la forma en la que está diseñado desde su núcleo. La falta de un sistema de emparejamiento definido suele suponer un reto a la hora de encontrar partidas que se adapten a tu idioma y tu ubicación y, además de eso, está la progresión, que puede resultar complicada de entender y no te permite llevar la clase que quieras desde el primer minuto. Es un poco demasiado complejo y puede llegar a ser alienante, sin embargo, si eres capaz de atravesar este muro de dificultad, lo que espera después es atractivo y gratificante, y propone algo diferente de lo que se ofrece normalmente en este género.

Hell Let Loose tiene un lugar concreto en este género, unos pocos individuos prosperarán y disfrutarán mucho con lo que ofrece. Pero, ojo, si prefieres títulos rápidos y más arcade, que no conlleven tanta comunicación en equipo, entonces esta no es una buena, incluso mostrando aún mayor realismo que juegos como Battlefield o Enlisted.