El misterio del planeta ZDR: la historia tras Metroid Dread

La quinta entrega principal, el rescate del proyecto de Metroid Dread, el desarrollo 'Made in Spain' de MercurySteam, el retorno de las mecánicas 2D tras casi dos décadas sin una entrega de este tipo completamente nueva. No se puede decir que el retorno de Samus Returns no venga cargado de datos por asimilar.

Pasada la vorágine de su anuncio, empiezan a asaltar las dudas. La cazarrecompensas vuelve con un nuevo planeta como destino y el retorno de una amenaza que debería haber desaparecido. Desde Nintendo, incluso, se han esforzado por recordarnos que cierto parásito está de vuelta y que, precisamente, ese retorno es el detonante de este nuevo capítulo.

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Es difícil estar al tanto de toda la historia de Samus, sobre todo con tantos años de espacio entre misión y misión. Pero hoy no es el día de repasar toda su trayectoria, sino de centrarnos en la historia de este nuevo capítulo. Porque Dread es el fin del arco metroid, el desenlace a una trama que empezó hace 35 años. ¿Y qué menos que intentar atar cabos para descifrar el secreto del planeta ZDR?

La historia tras Metroid Dread

Hay muchas preguntas que saltan automáticamente tras ver el tráiler de Metroid Dread, sobre todo si te has despistado en los últimos años (algo lógico). La primera es clara: ¿por qué Samus lleva esa armadura blanca y azul, en lugar de sus características hombreras?

Metroid Fusion: el origen de la nueva armadura de Samus

La respuesta a esto la tenemos en Metroid Fusion, precuela directa del nuevo juego. En la entrega lanzada en Game Boy Advance, la cazarrecompensas acompaña a una expedición científica en el planeta SR388. El planeta natal de los Metroides se consideraba ya un lugar seguro tras la aniquilación de dichas criaturas en Samus II de Game Boy o, mejor, en Metroid: Samus Returns de Nintendo 3DS, la entrega que se ha vuelto canónica por algo que mencionaremos más adelante.

Sin embargo, durante la expedición apareció una extraña criatura, el X. Un ejemplar de este parásito atacó a Samus y la llevó al borde de la muerte. Afortunadamente, los científicos consiguieron salvarla inyectándole suero del Bebé Metroide que vio fallecer protegiéndola de Mother Brain en Super Metroid. El bebé le había vuelto a salvar la vida.

• ¿Por qué suero de Metroide? Sorpresa, los Metroides fueron organismos creados por los Chozo para convertirse en depredadores de los X, parásitos nativos de SR388. Un detalle que, precisamente, explica la reaparición del X. Sin Metroides en su planeta, estos parásitos no tardaron en volver.

Pero, tras la intervención, varias partes de la Armadura Chozo de Samus se tuvieron que extraer por haber sido completamente deterioradas (por eso luego nacería ese SA-X que sigue protagonizando las pesadillas de más de uno). Así, estas piezas se sustituyeron por unos tejidos especiales que, tras Fusion y la absorción del propio SA-X para acabar con el Metroide Omega, seguramente fueran modificadas de nuevo.

"El hecho de que mi traje estuviera compuesto por componentes biológicos y de que estuviera tan integrado en mi cuerpo fue lo que empeoró mi estado. Los cirujanos de la Federación no pudieron quitarme el traje mientras seguía consciente."

La emblemática armadura de Samus queda completamente descartada. Se tuvo que modificar para mantener a la cazarrecompensas con vida. Tras su misión en los Laboratorios Espaciales Biometrox, es de esperar que su traje sufriera todavía más modificaciones. Más ahora, que nuestra protagonista ha sido capaz de asimilar al Parásito X y el ADN de Metroide en su interior.

Samus Aran es el único ser vivo capaz de acabar con ambas criaturas, y eso es clave para la historia de Dread.

El Parásito X aparece en el planeta ZDR

Como decía antes, es la reaparición del X la que causa los eventos de Metroid Dread, aunque en realidad todo apunta a otra dirección, más concretamente a Samus Returns. La Federación Galáctica recibe una grabación en la que se ve al Parásito campando a sus anchas en el planeta ZDR.

La organización, que ya dejó claro que lo de abrazar la legalidad lo lleva regular cuando se descubrió que estaba clonando Metroides en la estación espacial de Fusion (el SA-X se encargó de estos clones), ve esto como una oportunidad. Envía a 7 robots E.M.M.I. para investigar el lugar e intentar obtener muestras del parásito para clonarlo y tener así un buen arsenal de armas biológicas.

"El X infecta a otras criaturas y crece en los sistemas nerviosos de los organismos que le sirven de huésped. Su característica más preocupante es su capacidad para controlar y asumir la apariencia y comportamiento de sus víctimas [...]. De alguna manera, también consigue asumir los conocimientos y la información genética de los organismos en los que se hospeda."

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No obstante, al poco de llegar los robots, se pierde toda comunicación con ellos. En ese momento, Samus intercepta las transmisiones y decide tomar cartas en el asunto por su cuenta. Aunque no va sola, su mentor cuando formaba parte de la federación, Adam Malkovich, vuelve a acompañarla como lo hizo en Fusion, como una inteligencia artificial. Debemos mencionar, para aquellos a los que les chirríe esto, que Malkovich falleció tras Super Metroid, en Metroid: Other M, pero su mente se rescató al ser digitalizada.

El resto, es lo que hemos podido ver hasta ahora. Algo ha hecho que los E.M.M.I. pierdan el control y decidan atacar a Samus en cuanto la vean. Se desconoce cuál es la razón, aunque hay una figura que parece ser la artífice de todo: un Chozo.

La rebelión Chozo

Metroid siempre ha hablado de la caída de la civilización Chozo. La misma raza que crio a Samus tras perder a su familia, y la entrenó hasta convertirse en lo que es a día de hoy, era conocida por defender la paz y por sus enormes avances tecnológicos y científicos. Sin ir más lejos, fueron los responsables de dar vida a los Metroides, aunque estos se descontrolaran gracias a la energía Aeion. O, también, fueron los que diseñaron la Armadura Chozo de nuestra protagonista, esa que ahora es tan distinta.

"Desde que Samus fue inyectada con la vacuna metroide, ha comenzado a incorporar algunas de las propiedades de los Metroides a su configuración genética."

Como se puede ver en la galería desbloqueable de Metroid: Samus Returns en Nintendo 3DS, su historia tiene un lado oscuro. La crisis del planeta SR388 con los Metroides rebelándose pudo haber hecho que los Chozo allí presentes acudieran en busca de sus hermanos para recibir ayuda. En las dos últimas imágenes secretas del juego se observa concretamente a uno con túnica (parece tener un alto rango, ¿un General?) acompañado de soldados que, ya en la última imagen, aparece mostrando un cañón de brazo como el de Samus y habiendo arrasado con sus congéneres mientras lidera sus tropas.

Este mismo Chozo es el que aparece en un brevísimo fragmento de lo mostrado hasta ahora sobre Metroid Dread, manipulando un sistema informático. Qué está haciendo exactamente se desconoce, pero, dada su presentación previa, todo apunta a que es el villano de esta entrega. Alguien que rompe con la naturaleza pacifista de su raza para imponerse por la fuerza.

La tecnología escondida en ZDR

Otro punto importante que vincula a Dread con los Chozo son las Unidades Centrales, los superordenadores presentes en ZDR. En las sesiones de juego del Treehouse y los gameplay publicados por Nintendo, se ha mostrado que poseen un ojo mecánico y que, en el interior de su cubierta metálica hay un cerebro. Son tremendamente parecidas a las Unidades Aurora de Metroid Prime y, de hecho, hasta atacan con unos aros de energía idénticos a los de Mother Brain.

Su presencia en este planeta invita a mirar de nuevo a los padres de los Metroides. Mother Brain, el superordenador que dirigía a los Piratas Espaciales hasta su destrucción en Super Metroid, era una IA creada por los Chozo que escapó de su control (se van atando cabos, ¿verdad?). Es cierto que la Federación Galáctica creó a las Unidades Auroras basándose en esa tecnología, pero sus autores reales son esa raza a la que pertenece este individuo con tan mala pinta.

Se desconoce cuantas Unidades Centrales hay en ZDR, pero, dado que son clave para activar el Cañón Omega que puede aniquilar a los E.M.M.I. (única arma capaz, ya que su blindaje resiste cualquier otra cosa que haga Samus) y que hay un total de 7, cabe pensar que haya también 7 de estos ordenadores. Incluso, es posible que los robots de la federación se hayan descontrolado debido a estas IA.

Y detrás de todo volvemos a tener a la raza que creó las criaturas que dieron nombre a la franquicia, como también a la misma que preparó a la cazarrecompensas.

El fin de 35 años de historia

Yoshio Sakamoto mencionaba, poco después de anunciarse Metroid Dread, que este capítulo cerraría la historia de los Metroides, aunque iniciaría una nueva. Es difícil ver qué papel pueden jugar estos seres en el nuevo juego, sobre todo cuando fueron eliminados por completo en Metroid II (o en Samus Returns) y en Fusion. Aunque su presencia sigue en la protagonista porque, recordemos, lleva el ADN del Bebé Metroide en su interior.

Aunque no lo parezca, Nintendo ha dejado muchísimas piezas del rompecabezas del nuevo Metroid sobre la mesa. El problema, claro está, es que todavía faltan unas cuantas para poder construir la imagen completa. ¿Buscará ese General Chozo recuperar a los Metroides? ¿Querría aprovechar su poder y por eso aniquiló a sus congéneres durante la crisis de SR388? ¿Seguirán los Etecoones y los Dachoras en la nave de Samus?

El 8 de octubre tendremos las respuestas.