Final Fantasy XVI supuso un giro de 180 grados al estilo de juego de la serie, que hasta el momento se había basado en el combate por turno o en un estilo híbrido, combinando este con la acción. La decimosexta entrega se pasó a la acción pura, y este enfoque abrió las puertas a una nueva generación de jugadores más jóvenes a la longeva franquicia de Square Enix, según Takeo Kujiraoka.
El jefe de diseño de combate en el juego base y director de los DLC de Final fantasy XVI (cuya segunda expansión, The Rising Tide, sale a la venta esta misma semana), ha hablado con Push Square sobre el título ahora que se acerca a su primer aniversario a la venta, y de cómo este estilo ARPG ha ampliado el rango de edad de los jugadores.
"En los últimos años, los jugadores de la serie Final Fantasy han tendido a inclinarse hacia un rango de edad más elevado. Sin embargo, en esta ocasión, los resultados de una encuesta muestran que son más los adolescentes y veinteañeros que han jugado a Final Fantasy 16. Creo que esto demuestra que, hasta cierto punto, hemos conseguido uno de nuestros objetivos iniciales: que jugadores de todas las edades jueguen al último juego de Final Fantasy."
Aunque Final Fantasy siempre ha sido una saga que ha apostado por la innovación en su diseño, las últimas entregas de la serie no han reportado tantos beneficios como preveía el estudio. Recientemente, se ha conocido el dato de que Final Fantasy VII: Rebirth ha vendido la mitad que FFVII: Remake en el mismo periodo desde su lanzamiento, y esa puede ser una de las razones principales por las que la serie busca acercarse más a un público mayor y que sus responsables pasen el testigo a nuevos desarrolladores que continúen la obra.