Diablo Immortal - Impresiones con la beta cerrada

Hace unas semanas, Blizzard desveló que Diablo Immortal estaba entrando en la próxima fase de prueba y que un grupo selecto de jugadores de Android de Canadá, Australia, Corea del Sur y Japón podrían sumergirse en la versión para móviles de Santuario para ponerse al frente en la batalla contra las legiones del Infierno que amenazan la integridad de la nación. Esta beta cerrada se ha desarrollado como una versión más completa de Diablo Immortal e incluía una nueva clase de personaje para ponerlo a prueba (el Nigromante), nuevos lugares a los que viajar y, además, bastantes mejoras y correcciones que llegaban gracias a alfas anteriores.

A pesar de que la beta solo está disponible en sitios que están lejos de Europa, he podido probar esta versión de Diablo Immortal para ver qué tal se comporta y si deberíamos estar ansiosos por el lanzamiento de la versión móvil del emblemático RPG de acción de Blizzard.

Para empezar, es obvio que el juego se encuentra en un espléndido estado de forma. Va increíblemente fluido, los gráficos son impresionantes y mantienen la esencia de Diablo, y la experiencia en general está tan bien adaptada que no parece que sea un juego para móviles en ninguno de los sentidos. Lo dice un servidor, que siempre sale escaldado con la típica historia de los juegos para móviles que cogen un juego de renombre y lo destrozan con microtransacciones intrusivas que lo abarcan todo, y por mecánicas de juego de las que solo queda la estructura.

Es cierto que esto es algo que está cambiando en la plataforma, pero también tengo que destacar que, aunque Diablo Immortal aún no es perfecto, la experiencia principal es muy extensa y tendrás juego para rato antes de tener la sensación de que tienes que aflojar la cartera para ampliar la experiencia.

Quería empezar con esto, ya que es una preocupación personal y siempre lo ha sido desde que se anunció este juego y desde que tuve la oportunidad de probarlo hace unos meses. Sin embargo, después de echarle bastantes horas a Immortal en las últimas dos semanas, confirmo que las mecánicas de pago parece que están bastante bien llevadas, con moderación y equilibrio, y el Battle Pass es el núcleo de todo. Es posible que la situación cambie con el tiempo y a lo mejor se nos viene otro método encima, pero, si hacemos caso a lo que pasa en la beta, no deberíamos preocuparnos de cómo están gestionando esto en Blizzard ahora mismo.

Pero, pasemos al juego en sí. Diablo Immortal me sigue pareciendo un juego de móvil de primera. Parece que cada elemento de este juego se ha calibrado a conciencia y el resultado es una experiencia consistente con la que aún no he tenido ningún problema (a pesar de haber jugado en un servidor canadiense con más de 200 de ping).

Los controles táctiles son muy fáciles de manejar y no parece que limiten al jugador. El propio juego funciona muy bien. Para esta beta he jugado en un OnePlus 9 Pro (muchísimas gracias a OnePlus por mandarme uno para probarlo) y el móvil aguanta el juego sin despeinarse, con unos gráficos impresionantes y suaves y, con el modo de rendimiento activado, con unos 60 fotogramas por segundo fluidos (aunque es cierto que este modo hace que la batería del móvil se agote más rápido).

La mayor parte del juego es el Diablo más clásico, es decir, moverte por el mundo, aniquilar monstruos para conseguir recompensas cada vez mejores y poder asumir retos diferentes y más difíciles. En Immortal esta experiencia central está bien conseguida, con su multitud de lugares nuevos a los que viajar, como el Mar de Shassar y los Bosques Oscuros, y hay muchísimas misiones, premios, retos y diferentes formas de ganar experiencia, recompensas y objetos para avanzar en tu objetivo de ganar más fuerza y poder. Al principio puede parecer un sistema de niveles rápido pero, a partir del nivel 22 aproximadamente, la cantidad de PX que necesitas para subir de nivel aumenta de forma radical y empezará a costarte bastante. Tendrás que completar bastantes actividades para seguir aumentando de nivel.

Lo importante de este sistema es que la campaña principal de misiones, nuevos lugares y nuevas habilidades de clase se desbloquean cuando llegas a un nivel determinado, por lo que tendrás que entretenerte con las Fallas de desafío (mazmorras con límite de tiempo), mazmorras normales, misiones y diversas actividades antes de poder visitar áreas nuevas. No es para nada monótono, ya que todo lo que hay en el juego es una posible fuente de recompensa, así que estás en constante crecimiento en cuanto a poder y letalidad en el combate, aunque tu nivel progrese más lentamente.

En general, es un sistema tremendamente adictivo. Te verás haciendo solo una mazmorra más, una última misión, un último reto, en la búsqueda interminable de poder, como en un típico Diablo.

Este título también es un RPG y no se avergüenza de ello. El jugador dispone de una gran variedad de estadísticas y ajustes para modelar su personaje y su complexión para que se adapte a circunstancias específicas mediante la mejora del equipo, la creación de gemas que otorgan bonificaciones de atributos y el engarce de estas gemas en el equipo adecuado para obtener el mejor resultado. Es un sistema con habilidades que se pueden desarrollar muchísimo, pero también se pueden obviar para tener una experiencia más casual, es decir, para aquellos que no pretenden recorrer las mazmorras más difíciles en dificultad alta.

Dado que Diablo es un juego en el que el 'endgame' es también de suma importancia, en esta beta hemos podido ver lo que implicará eso, con el renovado Ciclo de Contienda introduciendo un enfoque nuevo del PvP para los jugadores más selectos de un servidor, y el sistema de niveles Paragon que está disponible para aumentar significativamente el desafío de una actividad PvE y obtener mayores recompensas. Y todo esto viene tras alcanzar un rango bastante alto, hazaña que no es rápida ni sencilla de lograr.

Por lo que respecta al multijugador, ya sea JcJ (PvP) o reuniendo grupos para un desafío JcE (PvE), en el juego está implementado un sistema de <strong>matchmaking muy fácil de usar</strong>, un chat de texto y varios métodos para acceder a la comunicación directa con otros jugadores. Es un sistema realmente consistente al que no le veo pegas, sobre todo teniendo en cuenta que aún es solo una beta cerrada.

En cuanto a las clases, Diablo Immortal tiene un grupo con espacio para cuatro, es decir, puedes tener un Nigromante, un Bárbaro, un Monje y un Cazador de Demonios disponibles a la vez. Todos los personajes parecen totalmente nuevos y sus habilidades también, como la de absorber más golpes, infligir una cantidad enorme de daño a un único objetivo o destacar a la hora de abrirse paso en grupos de enemigos menores. Por lo que he visto, el Cazador de Demonios es bastante divertido, pero es un personaje mucho más difícil para llevar solo, mientras que el Nigromante, junto a sus esqueléticos acompañantes, es una clase genial para embarcarse solo en la aventura de Immortal, ya que inflige mucho daño y tiene la habilidad de distribuir los objetivos de las unidades enemigas atacantes entre el Nigromante y sus aliados resucitados.

Me siento un poco extraño y algo incómodo con lo que voy a decir: Diablo Immortal aún no tiene fecha concreta de lanzamiento, pero, por lo que he podido ver, se trata de uno de los mejores juegos para móvil a los que he jugado. Las partidas son divertidas, el rendimiento y los gráficos son increíbles, sobre todo en el OnePlus 9 Pro, y hay grandes expectativas para lo que será el juego en cuanto se lance. No es perfecto y el tiempo que queda hasta el lanzamiento se invertirá en arreglar algunas cosas como el soporte para mando, que ahora mismo es bastante limitado y superficial, pero, aparte de eso, parece que en Blizzard están dispuestos a ofrecer un adictivo RPG para móviles que podría convertirse en un referente para los juegos de rol en móvil de ahora en adelante.

En su calidad de juego gratuito, lo cierto es que me impresiona bastante lo verdaderamente divertido que es y lo bien que está diseñado, porque he tenido miedo real de las limitaciones a la franquicia que podrían suponer la plataforma y las compras opcionales dentro del juego. No obstante, Diablo Immortal aspira a ser algo especial y no veo la hora de saber cómo va a ser el aspecto del juego en su lanzamiento en 2022 porque, para mí, se está convirtiendo en uno de los juegos más esperados del año.