Aunque hace un par de años sonaba oscuro y la gente reconocía antes los sellos THQ (Nordic) y Koch Media, Embracer Group no deja de aparecer en las noticias y su nombre ya empieza a calar entre la gente como lo que es: el grupo de publicación de videojuegos más grande de Europa. El imperio de Lars Wingefors y compañía ya cuenta con nada menos que seis divisiones (THQ Nordic, Koch Media y Deep Silver, Saber Interactive, Coffee Stain, Amplifier y DECA Games), y tras las diversas adquisiciones anunciadas ayer tiene una estrategia a medio-largo plazo tan ambiciosa como extendida por distintos mercados.
Cinco o seis comunicados emitidos por el grupo confirmaron el rendimiento por encima de lo esperado de relanzamientos recientes como Bob Esponja o Destroy All Humans y el fichaje de otros tantos estudios, pero el primer titular se lo llevó ayer naturalmente la compra de 4A Games, que ya hacen un nuevo juego de Metro y un multijugador.
Con las demás operaciones se sumaron varias empresas al ecosistema del grupo en sus distintas divisiones, incluyendo New World Interactive, un estudio muy capaz afincado en Colorado y responsable de Insurgency: Sandstorm. Al conglomerado de Embracer también se unen desde ayer los desarrolladores Sola Media, Pow Wow Entertainment, Palindrome Interactive, Rare Earth Games, Vermila Studios y Deca Games (que da forma a la pata de servicios del gigante).