Análisis de Blacktail

Si hay algo en lo que los franceses tengan la medalla de oro ante la mayoría del resto de nacionalidades, es en su originalidad, sobre todo a la hora de hablar de videojuegos. Antes de que Ubisoft usase la misma fórmula entretenida en casi todos sus títulos, los conceptos originales y chulos venían siempre de la mano de los franceses. Desde mi punto de vista, Quantic Dream también se ha encargado de brindar experiencias únicas a lo largo de los años, y, por último, pero no por ello menos importante, tenemos Focus Entertainment, que últimamente ha lanzado algunos de los juegos más impresionantes y originales a un mercado que normalmente no se arriesga. Su última incorporación ha sido Blacktail, desarrollado por The Parasight, de la que he podido disfrutar durante estas Navidades en Steam. Está disponible para PC, PlayStation 5 y Xbox.

Puede que conozcáis la leyenda de Baba Yaga, o puede que no, pero en el mundo eslavo es una bruja muy temida porque dicen por ahí que secuestra a los niños. A menudo, varias leyendas del mundo eslavo tienen un tono mucho más oscuro que las que manejamos en Europa Occiental, y esta no es diferente. En Blacktail, te pones en la piel de Baba con dieciséis años, a la que han acusado de brujería y, por consiguiente, expulsado de su tribu. Afortunadamente, el mundo fuera de la del pueblo es bastante exhuberante y vivo, así que Baba puede sobrevivir usando un arco y flechas.

La protagonista se llama Baba y no pretendo destripar nada, pero me pregunto si tendrá alguna conexión con Baba Yaga. Lo más seguro es que sí. Las criaturas con las que te vas cruzando están basadas en los cuentos populares eslavos; algunos los conocía, pero muchos otros los descubrí por primera vez en el juego. Baba ve una sombra que parece ella misma corriendo hacia el bosque, así que la persigue hasta que tiene que parar porque hay un puente roto. Junto al puente hay un montón de setas que pueden hablar por arte de magia y tres de ellas le dicen a Baba que le harán un camino para cruce el puente si ella mata al dragón que les cae mal. Son divertidas y la conversación que tienen con Baba está repleta de humor, pero también de misterio, lo que te hace pensar que está pasando algo más que no te esperas. Toda la interacción es cautivadora y tiene una atmósfera genial. A lo largo de la historia te vas encontrando con un montón de criaturas extravagantes y entretenidas que o están siendo honestas, o están manipulando a Baba para que haga algo por ellas y conseguir algo que quieren. Esto contribuye a que sea una historia fantástica en la que tienes que leer entre líneas para averiguar qué es verdad y qué es mentira. Me encantan las tramas que me hacen estar al tanto de todo y cuando están bien hechas es un gustazo.

Como ya he dicho, la historia está repleta de decisiones que Baba tiene que tomar, y tienen un verdadero sentido ligado a ellas, ya que pueden convertir a Baba en una criatura malvada, o en una buena. En todo momento hay decisiones importantes o insignificantes que tiene que tomar y que pueden afectar a las habilidades que puede desbloquear, algo que mola bastante. Me recuerda un poco al lado oscuro o al lado de la luz en Knights of the Old Republic, donde la moral va desbloqueando ventajas que solo están disponibles si eres bueno o malvado. Las decisiones con las que uno se ve topando son muchas y de distinta importancia; puedes encontrarte con una reina mitológica que quiere dominar el mundo y que está un algo de los nervios y puedes, o ayudarla permitiendo que sus hormigas se adentren en el bosque, o puedes destruir los hormigueros y obstaculizar sus planes. Hay cientos de decisiones como esta a lo largo del juego y los habitantes del mundo también interactuarán con Baba dependiendo cómo de buena o malvada sea, lo que es genial. En mi caso, opté por una Baba buena, más que nada, porque en general lo paso mal si hago cosas malas en videojuegos. Sin embargo, me vi tentado y acabé haciendo algunas hazañas de las luego no me sentí orgulloso, pero esto también es una prueba de lo bien que está escrito el juego, donde solo tienes que esperar para ver lo que pasa si decides no disparar al pájaro que se ha quedado atrapado en el suelo del bosque.

La mecánica del juego en sí misma es muy parecida a la de otros títulos de mundo abierto. Te sueltan en el mundo de Blacktail y entonces tienes que explorar. Es bonito y colorido y tiene un montón de zonas distintas como bosques, pantanos y ruinas. Todo es encantador y tiene personalidad. Tendrás que encontrar tus propios palos y piedras para hacer flechas y poder defenderte, y solo puedes llevar un número de flechas limitado, pero vas desbloqueando más espacio conforme avanzas. Consigues habilidades mientras vas progresando en el juego y te harán falta para poder sobrevivir. Mucho. Puedes recoger flores amarillas y ponerlas en jarrones por todos lados; si lo haces, ese es un sitio en el que puedes revivir cuando un duende se haya acercado mucho. No soy muy fan de esto, porque puedes perder mucho progreso. Es parecido a como funciona en muchas obras parecidas a Souls y nunca me ha gustado mucho la forma en la que hace la muerte frustrante, aunque puede que solamente me haga falta mejorar y ya está. Pienso este enfoque no encaja con un juego como Blacktail porque por esto perdía un montón de progreso repetidamente.

En Blacktail tienes que ir recogiendo todo lo que se cruce por tu camino, porque todo tiene un uso, puedes comprar habilidades con todo lo que recoges. Las cosas más importantes que puedes recoger normalmente están en cofres protegidas por criaturas que no quieren lo mejor para ti de verdad. Puede complicarse un poco intentar recoger todo y te da la impresión un poco como con Fallout 4 de que recoges todos los trastos automáticamente, ya que puedes usarlos luego para mejorar el equipamiento y las habilidades. Las habilidades que después puedes comprar son mejoras para tu personaje; más salud y más flechas son las primeras que desbloqueas, pero más tarde también hay nuevos ataques y habilidades que hacen la vida de Baba un poco más fácil.

También hay luchas contra jefes en Blacktail, pero me parecen algo chapuceras. En general son puzzles sencillos en los que tienes que encontrar la forma de herir al enemigo o tendrás que arreglártelas con un montonazo de criaturas extra que están bajo el mando del jefe. No son los más divertidos que he probado, pero me pasé unos pocos tras algunos intentos.

Blacktail es un título encantador y la trama en particular es una experiencia genial, pero hay algunas cosillas que podrían mejorarse para la próxima entrega, si es que acaba teniendo una segunda parte. Sin embargo, con todo, creo que es un lanzamiento que debe elogiarse por su originalidad y el toque de frescura que aporta a la fórmula del mundo abierto.