Las ardillas no se consideran exactamente las criaturas más peligrosas que existen. Aun así, pueden ser irritantes y pueden transmitir enfermedades, que son las dos razones por las que Peanut -una ardilla convertida en estrella de los medios sociales- fue capturada por la policía de Nueva York esta semana.
El propietario de Peanut, Mark Longo, fue informado de que miembros del público se quejaban de la posible inseguridad del alojamiento de animales salvajes que podrían transmitir la rabia y de la tenencia ilegal de animales salvajes como mascotas. La cuenta de Instagram de Peanut tenía más de medio millón de seguidores.
Poseer un animal salvaje sin licencia es contrario a la ley del estado de Nueva York. Longo se había quedado con Peanut tras rescatarlo porque, después de soltarlo en la naturaleza, Peanut volvió pronto con la cola hecha jirones y un hueso asomando. Antes de la redada, Longo dice que estaba presentando los papeles para certificar a Peanut como animal educativo.
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