Análisis del teclado Steelseries Apex 5

El teclado Apex 5 tiene dos características muy convincentes. La primera es la típica pantalla OLED de los teclados Apex y la otra es la versión híbrida de los interruptores de Steelseries, es decir, unos switches que no son ni de membrana ni mecánicos, sino una mezcla de los dos. En realidad, parece que es el tipo de pulsación que vale como un buen término medio para aquellos usuarios que no están preparados para zambullirse en el mundo de las teclas mecánicas, pero que aun así quieren descubrir diferentes tipos de tactos. Al principio, no parecía que existiera este grupo social, pero cada vez más y más personas de la oficina confirman que prefieren los teclados híbridos, así que nos amoldamos un poco.

SteelSeries ha escogido para sus teclas los interruptores Cherry Blue. Por lo tanto, al teclear nos da la sensación de que es lo mismo que cuando tecleamos con estos, pero la parte final y el punto de activación no son los mismos. A nosotros nos gusta mucho este tipo de switch, tanto para jugar como para escribir.

El fabricante insinuó en su campaña de marketing, de manera poco sutil, que varias marcas de la competencia habían jugado sucio, ya que habían utilizado interruptores de membrana en los que se encontraba un pequeño trozo de plástico que daba la sensación de que fuera mecánico. No vamos a intentar desmentir este mito desmontando un montón de teclados para comprobarlo, pero sí podemos llegar a creérnoslo. Por supuesto, el contacto de los SteelSeries es "real", ya que se asienta en un muelle de metal. De hecho, el fabricante reveló que puede que se asimilase más a uno mecánico. Se necesitan dos milimetros de presión para que funcionen y cuatro para hundirlos hasta el fondo, lo cual permite el cambio de teclas más rápidamente. Sin embargo, la parte inferior de los interruptores no está hecha de metal, sino de membrana. Por lo tanto, SteelSeries no miente al decir que el teclado es híbrido, ya que, como hemos visto, utiliza una combinación de ambos tipos de contacto.

Bueno, sus representantes también califican este teclado como "asequible", aunque con esto no estamos tan de acuerdo.

El cuerpo del hardware está hecho de aleación de aluminio, lo cual hace que este parezca elegante y sólido. Además, gracias al reposamuñecas, que se une magnéticamente al teclado, potencia esa sensación de que es de buena calidad. Es algo difícil dejar en reposo las manos, pero no es incómodo.

Es uno de nuestros diseños favoritos, sobre todo por su esqueleto al descubierto y las teclas "flotantes". Es muy bonito y fácil de limpiar. La parte inferior del teclado tiene unos surcos de goma para los cables que le van muy bien, ya que proporciona el nivel justo de personalización que se espera de un producto de buena calidad.

Dado que se trata de un teclado gaming, cada tecla tiene una iluminación RGB configurable. SteelEngine 3 sigue siendo un gran programa para modificar todas estas opciones, además, algunos de los efectos programados por defecto son sorprendemente buenos. La iluminación es buena y la luz es indirecta, lo que significa que se refleja en una superficie diferente para que no ilumine en exceso la cara de quien esté utilizándolo. El driver SteelEngine es sencillo a la par que complejo, pero, en general, es fácil de usar, sobre todo si tienes varios dispositivos de la casa conectados a la vez.

Nos encanta la pantalla OLED que se encuentra en la esquina superior derecha, al igual que la rueda de desplazamiento. Seguramente se debe a que usamos Tidal, que soporta las características del teclado, y al hecho de que nos encanta tener la opción de ajustar el volumen directamente desde el teclado. Sin embargo, nos da algo de pena no poder utilizarlo más que para un par de juegos y aplicaciones, ya que nos encantaría la idea de poder recibir los mensajes y notificaciones de Discord, por ejemplo.

En general, no tenemos ninguna queja sobre la práctica y las cualidades de uso. Es agradable para escribir, incluso durante varias horas, y la respuesta y resistencia a la pulsación es muy buena a la hora de jugar.

Lo único que no nos pareció tan bien fue su precio, ya que los 120-130 euros que piden por un teclado híbrido se va de madre, sobre todo si tenemos en cuenta el hecho de que lo venden como "una sensación mecánica por la mitad de precio". En nuestra opinión, 90-100 euros hubiera sido una cantidad más justa para los consumidores y más competitiva para ellos. Somos conscientes de que las teclas híbridas y la pantalla OLED son lo que hacen al Apex 5 más caro que, por ejemplo, el Razer Ornata, pero sigue siendo demasiado. Como consolación, podemos tener en cuenta que, a menudo, los productos de SteelSeries acaban rebajados a causa de la gran competencia.

Así pues, si lo encuentras rebajado y eres de los que escriben y juegan frecuentemente, tendrás un teclado híbrido con lo mejor de los dos mundos perfecto para ti.