Análisis de Omen 16 AMD (2023)

Siempre es un proceso complicado pasar a un nuevo portátil para juegos después de muchos meses o años sirviéndote de otro al que te habías acomodado. En mi caso veía trabajando con un Lenovo Legion ya bastante tiempo, y muchos de los procesos, tiempos o "sensibilidades" que como usuario notaba ahí luego se traducían en mayores alegrías (o fruncimiento de ceño) cuando me he pasado a probar el Omen 15 tanto para maratonianas sesiones de juego como para un trabajo diario de oficina. ¿El resultado? Ahora tengo un nuevo portátil principal para mi día a día.

Lo primero en lo que nos fijamos es en el diseño, y ahí es incuestionable el buen gusto y la sencillez de las líneas del Omen 16 (2022). No soy muy amigo de la tendencia actual de que los ordenadores gaming deben ir plagados de LEDs y colorines. Estéticamente, son demasiado llamativas (y, por tanto, son una fuente de distracción en la partida), consumen batería extra y no casan nada con un portátil que puede utilizar su potencia para otras funciones, como edición de video o trabajos de diseño. Por suerte, Omen entiende que el Omen 15 debe servir no solo al disfrute de los últimos títulos a resolución Ultra (luego volveremos a esto), sino que además elimina esos detalles superfluos para ofrecer un hardware elegante, sobrio y todoterreno, ya que además tiene un peso de 2,41 kg.

La unidad que hemos empleado para este análisis cuenta con una configuración con procesador AMD Ryzen 9 6900H de ocho núcleos duales y funciona a 1.665 Mhz, con 16 GB de RAM y tarjeta gráfica 3070 Ti. No es el tope de la gama, pero es más que suficiente para multitarea y para jugar a 60fps en casi todos los juegos. Por ejemplo, El reciente Ratchet and Clack: Una dimensión aparte en calidad de texturas Alto, DLSS activado y a 60 FPS fijos, no ha detectado ninguna caída según el controlador de Nvidia ni en secuencias cinematográficas ni en secuencias de juego.

De hecho, lo mismo ha ocurrido con Deathloop y todas las opciones activadas. Por defecto los ajustes están en alto-ultra y no hay caídas de FPS ni nada por el estilo. Aunque los ventiladores laterales y posteriores sí tuvieron que trabajar, pero solo para darme otra agradable sorpresa: el Omen 16 de 2022 es increíblemente silencioso, incluso tras dos horas con el shooter de Arkane en marcha.

Y bien iluminado. La pantalla IPS con tasa de refresco de 144Hz cuenta con hasta 300 nits regulables, con que es ideal tanto en ambientes con pocas fuentes de luz como cuando queremos trabajar sin generar luz. Me gusta que además el panel esté ligeramente elevado para acomodarse mejor a la vista frontal que otros modelos como, por ejemplo, el Lenovo Legion. La nitidez, el contraste y el equilibrio de color hacen que sea ideal tanto para los juegos como para disfrutar de una buena película o serie por streaming.

Ahora bien, he tenido un conflicto interior respecto a la distribución del teclado. El OMen 16 (2022) tiene cada tecla bien separada una de otra y un gigantesco touchpad, pero esta amplitud para evitar errores de escritura también significa que han tenido que sacrificar el teclado numérico que generalmente encontraríamos en la zona derecha. Algo lógico, teniendo en cuenta que la función principal del dispositivo es el gaming. Pero es algo un poco limitantes si quieres emplear este portátil de más de 1.500 euros en algo más que jugar.

El Omen 16 (2022) es el portátil perfecto que llevarse a cualquier Game Jam, ya que su reducido peso, sus ventiladores silenciosos, su rendimiento óptimo y su diseño estilizado lo convierten en uno de los mejores portátiles con los que he jugado y trabajado. Y Ahora que su sucesor está a la vista, seguro que encuentras alguna oferta interesante con la que hacerte con éste a un precio mucho más sugerente.