El momento que vivimos en la oferta de tecnología de consumo es ciertamente abrumador. Tener que elegir a día de hoy cual será nuestro próximo dispositivo, es poco menos que una carrera contra un catalogo infinito de opciones diferenciadas apenas por ligeros vaivenes, pero que a la hora de la verdad pueden afectar directamente al desempeño que recibiremos por parte de lo que elijamos y que, a la postre, notaremos cuando la decisión ya esté tomada. En fin, algo muy complicado no cabe duda.
Pero toda esta reflexión tenía un objetivo en positivo: el hecho de que esa misma diversidad nos permite atinar mucho más cuando optamos por hacernos con un aparato que necesitemos. Actualmente es fácil encontrar exactamente lo que busquemos y eso es así al margen del presupuesto que manejemos, sean miles de euros o, como en el caso de los Trust Yavi, un precio mucho más contenido.
La marca neerlandesa optó hace ya unos años por apostar por una gama variada pero siempre dentro de un coste ajustado, y los earbuds Yavi son un excelente ejemplo de ello. Cuando los usamos por primera vez, es necesaria una introspección en la que llegamos a la conclusión de que no estamos comprando los mejores auriculares intraaurales del mercado, estamos comprando los que precisamos y esa es su vocación. Los Yavi son unos dispositivos de gama de entrada pensados para su uso cotidiano sin que necesitemos una calidad de sonido AAA+ o unas características superiores.
Estos auriculares de Trust dan lo que ofrecen y la verdad es que lo hacen muy bien. En nuestras pruebas nos hemos topado con unos cascos solventes y cómodos, excelentes para salir a caminar o ir al gimnasio ya que, pese a que no poseen cancelación activa de ruido (algo totalmente lógico en este segmento de precio) su ajuste natural al oído aísla de forma muy eficaz en entornos con un ruido ambiente medio. Si nos queremos meter en un avión y no enterarnos de que estamos sentados junto al motor rugiente de un 747, los Yavi quizá no son la opción más recomendable, pero para un amplio rango de acciones que es en el que nos movemos la mayoría de usuarios, cumplen perfectamente.
En cuanto al sonido, escucharemos un espectro ligeramente tendente a los agudos y unos bajos algo menos notables de lo que nos gustaría, nada crítico y muy normal en su rango de coste pero quizá es un punto que dependiendo del tipo de contenido que escuchemos, puede deslucir algo la experiencia.
Cualquiera puede darse cuenta de que varias veces hemos hecho referencia al precio de los Yavi cuando nos referimos a sus características y esto es relevante porque sin duda es uno de los motivos que nos harán decantarnos por este set de auriculares. Por 29.99€ resultan en una opción muy atractiva como cascos de "batalla", es decir unos dispositivos fiables por un precio muy atractivo.
Los Yavi están disponibles en tres colores y Trust presume de la gran sostenibilidad de sus materiales. Esto es algo difícil de valorar, pero lo que sí es un hecho mesurable, es su autonomía, que también según el fabricante, nos brinda unas 6 horas de sonido ininterrumpido y que llegan hasta 23 con el estuche de carga que se conecta con una entrada USB-C para recargar. Estas cantidades nos son muy familiares en cascos similares, aunque quizá en este caso se ven algo más vitaminadas y eso es algo que se agradece. Los Yavi tienen una superficie táctil que da acceso a unos sencillos controles para adelantar las pistas que escuchamos o pausar el contenido y que para nuestro gusto reaccionan demasiado rápido y pueden ser pulsados por error.
En resumen, podemos decir que los Yavi de Trust son una excelente elección dentro de la gama de acceso de los cascos in-ear y que sin duda ofrecen un rendimiento correspondiente a su reducido precio. No es tan fácil como parece encontrar cascos de estas características por lo que cuestan los Yavi, salvo acudiendo a apuestas por marcas completamente desconocidas y que pueden ser una pequeña lotería y acabar mal en más ocasiones de las que nos gustaría.
Los Yavi dan lo que nos ofrecen y a nosotros nos han resultado cómodos y agradables y por tanto no podemos hacer otra cosa que no sea recomendarlos por su precio y estar agradecidos por un catálogo global de tecnología que permite que aquellos que tienen un presupuesto más ajustado, puedan disfrutar de unos intraauriculares inalámbricos de calidad sin tener que hacer sufrir a sus carteras.