Los juegos de rol japoneses están de nuevo en auge, y la sensación es que cada dos semanas se lanzan varias aventuras nuevas y emocionantes del género. Sin embargo, esto significa que la competencia es cada vez mayor entre los títulos que se lanzan, y a la sombra de juegos como Final Fantasy VII: Rebirth, Metaphor: Refantazio y Eiyuden Chronicles: Hundred Heroes, está claro que títulos como Fairy Tail 2, aunque siguen ofreciendo una aventura medianamente agradable, no alcanzan ni de lejos el mismo nivel.
Fairy Tail como secuela tiene sus orígenes en la serie de manga publicada en 2006, y la marca ha seguido cosechando éxitos en pantalla desde entonces. La aventura ha sido adaptada tanto en series de anime como en películas, y ha visto su buena ración de videojuegos, con el título más antiguo disponible para el formato PSP desde 2009. Por tanto, no cabe duda de que Fairy Tail cuenta con seguidores leales y entregados, y admitiré que mi historia con la marca es extremadamente limitada, ya que en su mayor parte he visto imágenes y vídeos en los que los distintos personajes se han integrado entre sí. Por esta razón, no podré juzgar lo bien que Fairy Tail 2 gestiona el material original de la mejor manera, sino que mi papel será más bien calificarlo como un juego de rol al uso.
Porque sin mucho conocimiento de la historia que ha tenido lugar antes, te ves arrojado a Fairy Tail 2 sin demasiada información que captar. No hay duda de que es la continuación directa de una historia ya en curso, y aunque intentan ser educativos y acogedores en su estilo narrativo, hay muchas cosas que ocurren sobre las que es difícil, al menos inicialmente, sentirse comprendido como forastero. Te meten más o menos en la piel de varios héroes diferentes, y con la amenaza velada de un villano carismático, el destino del mundo parece descansar sobre tus hombros. Es una premisa clásica que ya se ha utilizado antes, y aún funciona, debo añadir, pero no resulta especialmente fresca ni emocionante si ya has jugado a la mayoría de los títulos del género.
Sin embargo, nos familiarizamos rápidamente con varios personajes diferentes, y luego es un juego de rol clásico y anticuado de la escuela japonesa, en el que tienes que seguir una historia, explorar entornos más pequeños y luchar contra diversos bichos en la cadena de montaje. Las batallas son probablemente la mayor razón por la que querrías jugar a Fairy Tail 2, ya que las rápidas y espectaculares batallas se desarrollan en una cinta transportadora. Puede que el sistema en sí no sea el más avanzado en lo que se refiere a acumular un medidor para luego quemar varios ataques especiales, pero el alto ritmo mezclado con la gran cantidad de personajes diferentes (que se pueden cambiar como quieras) hace que sientas constantemente que el pulso está subido. También hay algunos momentos interesantes en los que puedes combinar distintos elementos para causar más daño, y el hecho de poder combinar ataques con tus personajes hace que nunca resulte aburrido, aunque ocasionalmente puede volverse un poco repetitivo durante las sesiones de juego más largas.
Los gráficos son entonces de la variedad clásica, donde el aspecto ligeramente caricaturesco da al juego una apariencia sencilla pero elegante, sin ofrecer realmente nada espectacular. En los últimos años, el estilo caricaturesco se ha diluido un poco en juegos como Genshin Impact, la serie Tales y Persona, entre otros, y Fairy Tail 2 no hace nada nuevo para destacar visualmente. Además, cuanto más observas los sencillos entornos, más obvio resulta que se trata de un juego creado para la última generación de consolas, por lo que no puedes esperar ningún caramelo para la vista, aunque el diseño en sí siga siendo válido para los estándares actuales.
Tampoco hay opción de tener activado el audio en inglés, así que tendrás que escuchar a los actores de voz japoneses de principio a fin. Esto en sí no es algo negativo, pero si eres de los que quieren poder oír lo que dicen los personajes en lugar de leer los diálogos, estás avisado. En cuanto al idioma, es posible que tengas que cambiar la configuración de tu consola para que el juego muestre subtítulos en inglés (no, al momento de redactar este análisis, no hay rastro de idioma castellano en el juego). De hecho, mi primera media hora con el juego consistió en conseguir que el juego no estuviera en japonés, ya que el título empezaba con esa configuración por defecto, sin menú para cambiarla. Al final, y tras muchos insultos, conseguí cambiar el idioma configurando mi PlayStation 5 con menús en inglés, y solo entonces el juego se dio cuenta de que debía mostrar algo distinto al japonés. Innecesariamente engorroso, por decirlo sin rodeos.
En definitiva, describiría Fairy Tail 2 como un juego que hace lo que se supone que debe hacer sin alardear demasiado. Porque todos los sistemas cumplen su propósito. Los personajes parecen elaborados sin brillar, los gráficos son atractivos sin añadir nada nuevo, y la música y la ambientación te adormecen en un juego de rol japonés clásico que se ciñe al marco al pie de la letra. Sin embargo, no hay nada especial que capte tu interés, sino que la mayor parte está bien hecha sin llegar a emocionar. Si ya eres un fan de la serie, sin duda veo que estarás más entretenido que alguien que nunca haya conocido a estos personajes, pero si, como yo, no sientes ninguna conexión con el mundo que conforma esta colorida saga de anime, probablemente deberías esperar a una oferta o a probar suerte con la serie de anime antes de enfrentarte a Fairy Tail 2.